domingo, septiembre 25, 2005

MI VIDA: SI ES QUE A ESTO SE LE PUEDE LLAMAR VIVIR

Desde muy joven, destacó la figura intelectual de Enrique P. Mesa García. Así, con tan sólo 5 años fue exhibido de clase en clase por su capacidad para decir los números impares sin equivocarse (siempre he sido brillante -suele asegurar-). Trasladado luego al colegio Maravillas, donde conocería a su ilustre colega Ricardo Royo-Villanova, allí consiguió, con esfuerzo y estudio, sacar 1º de EGB. No contento con esa marca, luego hizo 2º y, de nuevo, lo aprobó. En su compromiso con la Ilustración fue haciendo sucesivamente tercero, cuarto, quinto, sexto, séptimo y octavo llegando así a conseguir un primer título que, desde luego, no sería el último. Comenzó luego el BUP (Bachillerato Unificado Polivalente, que casi nadie sabe lo que significa). Con brillantez intelectual, pero dosificando las fuerzas para posteriores tareas más importantes, pasó los cursos sin dificultad y en tercero de BUP se encontró con la Filosofía. Si bien enriqueppuntomesagarcía ya tenía un contacto con ella, (tengo mucha vida interior -enfatiza-), la fuerza del encuentro hizo que surgiera el amor por la sabiduría (obsérvese la gracia). Esto se acrecentó en COU (Curso de Orientación Universitaria) siendo de hecho una de las pocas materias que aprobó en Selectividad (media de 4’6). ¿Dónde ir así? Fue, efectivamente, a Filosofía en la Universidad Autónoma de Madrid.

Una vez en su carrera, enriqueppuntomesagarcía pronto destacó: era el único que llevaba corbata y, además, inventó el célebre Tour Weltanschauung (sic) consistente en premiar la puntualidad y presencia en clase (cosa que generalmente era muy dura). Una vez acabados los estudios, dosificando una vez más los esfuerzos, presentó su Memoria de Licenciatura sobre un tema inmortal: José Mesa y Leompart: una monografía, que le valió, a él y a todos los que la presentaron ese año en el departamento, el Premio Extraordinario de Licenciatura. Tras disfrutar, nunca mejor dicho, de una beca de doctorado, nuestro héroe tuvo que ponerse a trabajar (sólo por dinero- afirma-).

Comenzó dando clases particulares en la Moraleja, donde iba en el autobús con jardineros marroquíes y sirvientas sudamericanas (fue una experiencia de internacionalismo proletario –dice, intentando ocultar que no sabe conducir-). Al año siguiente, ya estamos en 1994, cómo pasa el tiempo cuando uno se divierte, entró en el colegio Fuentelarreyna, donde su éxito con el alumnado se unió al cariño de sus compañeros profesores debido a sus ingeniosos comentarios y acciones, comenzando así una constante en su carrera profesional. Tal vez por ello, en el año 96, abandonó la privada y entró en el IES Alameda de Osuna como interino. Mientras tanto, y en el tiempo que le dejaba libre su siesta, fue componiendo su tesis doctoral sobre otro inmortal tema: Los orígenes del PSOE: mercancía, positivismo y socialdemocracia (los grandes temas siempre han sido de mi interés, asegura, pero son muy cansados). Por fin, en el año 98, a cien del desastre, ocurrieron dos hechos históricos. Por un lado, enriqueppuntomesagarcía llegó a ser doctor (el doctor Mesa, no lo supongan) tras una competida lectura (sí, estuve brillante -le gusta recordar-) y, por otro, sacó plaza en la oposición a profesor de Secundaria de Filosofía (sí, estuve brillante -le gusta recordar con su escaso vocabulario-).

Entró en el IES Duque de Rivas donde rápidamente supo ganarse no sólo el amor y respeto de sus alumnos que le admiraban (siempre fui el héroe que necesitaban-añade en sus cada vez más frecuentes delirios-) sino el cariño y simpatía de sus compañeros por sus intervenciones en el claustro (una vez más –asevera-). Pero el destino quiso, ¡ah, la fuerza del sino! –obsérvese el ilustrado humor- que tras ser calificado por sus colegas como un hjjodeputa, sin vida propia y que no daba 18 horas de clase (tenían razón en dos de tres –asegura siempre sincero-) y tras el año 2005-2006 donde tenía 18 horas lectivas -¿lo pillaron verdad?, España avanza- fuera destinado, de forma definitiva, a un nuevo centro: el IES Federica Montseny (siempre de personajes ilustres a personajes ilustres): Fuenlabrada.

Allí, enriqueppuntomesagarcía, en plaza definitiva desde 2006, ejerció su habitual encanto con los alumnos (sigo siendo su héroe -exclama sin comprender la tragedia de esas palabras-) y con sus compañeros profesores: comentarios simpáticos, alocuciones (¿sabe usted lo que es una alocución?) brillantes, propuestas racionales en el claustro en torno al horario (¿¡ha dicho el horario!?, ¿de los funcionarios?, ¿y para eso me saqué yo una oposición?, ¡fascista!). Y de nuevo sus compañeros de nómina y trabajo (¿trabajo?) inmediatamente buscaron un medio de agradecerle su cooperación. Así que allí fueron y en célebre claustro, que incluyó a la señora directora pidiendo el voto secreto, le fue negado seguir dando Psicología en el centro aunque la cogieran la mayoría de los alumnos: no hay nada como trabajar bien –dice mientras recoge sus cosas en una caja de cartón y demuestra que no se entera-. En definitiva, a día de hoy (una plaza definitiva que le duró tres años) nuestro héroe busca nuevo centro.
Pero, cuidado, tal vez sea el tuyo.

Por último, enriqueppuntomesagarcía trabaja no sólo en este blog donde demuestra de forma fehaciente el nivel y rigor de la filosofía española, cosa que ya hizo en El Piquete Digital que a su vez recogió la antorcha de otra revista de anterior tirada e ilustre prestigio (Götterdämerung cornick no, en cristiano Liberación Sefardí a sueldo de Moscú": "Nunca acabaremos artos (sin hache)) sino a su vez en dos obras magnas que, no dudamos, darán mucho que hablar ( bufff, ya verán- advierte- aunque sabe que una ya acabada no ha servido, otra vez, de nada) así como en la fundación de una revista de filosofía en la red y en una página de profesor para sus alumnos (trabajo bastante –dice- incluso a veces he pensado dejar de echarme la siesta, pero enseguida se me pasa).