0.- hubo un tiempo en que la pulsera powerbalance prometía mejorar el equilibrio a través de algo así como canalizar las energías del cuerpo. Las llevaba un montón de gente y de famosos y de políticos. Y si decías algo contra ellas eras rápidamente tachado de estúpido y que de qué ibas: siempre amargando.
1.- ZP era un héroe. Por fin, te decían, un presidente de izquierdas. Y añadían, de verdad. Tú eras de derechas, pues ¿cómo podías estar en contra -algo que sin duda sería la última medida del presidente- de la promulgación de un real decreto por el que ganara la guerra civil la República? Pero, la última medida fue indultar a un banquero.
2.- El PSOE, lógicamente, ha perdido las elecciones.
3.- Y el PP las ha ganado.
4.- Pero, ¿y la izquierda? Recuerden ustedes que el 15M iba para movimiento de masas. La mayoría, decían. Pues parece, sumen aquí y comparen acá, que no. Ni con la abstención.
5.- Así, la pregunta fundamental es: ¿por qué la gente ha votado masivamente a la derecha? O dicho de otro modo, ¿por qué ha abandonado a la autoproclamada izquierda. Alguien podría decir que IU ha subido sus votos -y UPyD, que tal y como está el patio es más de izquierdas que muchos- pero ni sumándolos da la pérdida del PSOE. La izquierda, sin duda, ha perdido presencia social.
6.- Es muy ingenuo pretender que un hecho social pueda tener una única respuesta. Hay varias. Pero tampoco somos tan listos, solo pondremos las que creemos que son ciertas.
7.- La primera fue la entronización por la izquierda de Zapatero. Su figura fue llevada hasta los límites del ridículo varias veces y no solo por los pelotas que le debían su puesto, como Pajín, sino incluso por gente más seria, como Llamazares, que no dudó en postularse como ministrable. Así, Zapatero era el héroe de una nueva izquierda que había eliminado el contenido social para admitir la forma de ser, el marketin puro y duro, como discurso. Cuando la forma de ser claudicó, o se reveló realmente, la fuerza, coherentemente, se desplomó a velocidad de vértigo. La caída de ZP, o su desenmascaramiento, fue directamente proporcional a la caída del PSOE. La imagen arrasó, porque ya lo había hecho antes, con el proyecto.
8.- Y esta fuerza de la imagen implicó la eliminación del discurso social. Ante el crecimiento desmesurado del paro y la crisis, la izquierda consideró que su discurso fundamental no era sino la memoria histórica y algo sobre niños desaparecidos -un asunto gravísimo aunque se haya convertido en propaganda electoral-. Así, la autoproclamada izquierda fue dejando a la derecha todo terreno socioeconómico y esta, con un discurso repleto de falsedades, fue aclamada como triunfadora. No se trata de que se impusiera un pensamiento único, como se quejan lo llorones, sino que el único pensamiento, por llamarle de alguna forma, que la gente escuchaba de forma generalizada sobre la situación socioeconómica era el discurso de la derecha. Así, abandonados ante un agravamiento de la crisis cada vez peor, la gente solo escuchó una respuesta.
9.- Y todo lo socioeconómico, conviene recordarlo, fue la base desde la que se extendió la izquierda. La misma que ahora había dejado sola a la población, además a la más desfavorecida, anclándose en debates pijos sobre memoria histórica y dónde reenterrar, ¿existirá el verbo?, a Franco.
10.- ¿Y el revulsivo 15M? Ni reformista ni revolucionario. Para ser lo primero les ha faltado propuestas creíbles; para lo segundo, profundidad de pensamiento. El 15M ha acabado siendo, como era de prever, un ejército enrollado de salvación. Y, ya lo analizaremos, un lastre para repensar una izquierda reformista -y una ñoñería para una revolucionaria-.
11.- Pero, no hay que perder la esperanza. Hoy mismo, domingo ya, el periódico progresista por excelencia, a las 10 de la mañana, tenía esta portada:
1.- ZP era un héroe. Por fin, te decían, un presidente de izquierdas. Y añadían, de verdad. Tú eras de derechas, pues ¿cómo podías estar en contra -algo que sin duda sería la última medida del presidente- de la promulgación de un real decreto por el que ganara la guerra civil la República? Pero, la última medida fue indultar a un banquero.
2.- El PSOE, lógicamente, ha perdido las elecciones.
3.- Y el PP las ha ganado.
4.- Pero, ¿y la izquierda? Recuerden ustedes que el 15M iba para movimiento de masas. La mayoría, decían. Pues parece, sumen aquí y comparen acá, que no. Ni con la abstención.
5.- Así, la pregunta fundamental es: ¿por qué la gente ha votado masivamente a la derecha? O dicho de otro modo, ¿por qué ha abandonado a la autoproclamada izquierda. Alguien podría decir que IU ha subido sus votos -y UPyD, que tal y como está el patio es más de izquierdas que muchos- pero ni sumándolos da la pérdida del PSOE. La izquierda, sin duda, ha perdido presencia social.
6.- Es muy ingenuo pretender que un hecho social pueda tener una única respuesta. Hay varias. Pero tampoco somos tan listos, solo pondremos las que creemos que son ciertas.
7.- La primera fue la entronización por la izquierda de Zapatero. Su figura fue llevada hasta los límites del ridículo varias veces y no solo por los pelotas que le debían su puesto, como Pajín, sino incluso por gente más seria, como Llamazares, que no dudó en postularse como ministrable. Así, Zapatero era el héroe de una nueva izquierda que había eliminado el contenido social para admitir la forma de ser, el marketin puro y duro, como discurso. Cuando la forma de ser claudicó, o se reveló realmente, la fuerza, coherentemente, se desplomó a velocidad de vértigo. La caída de ZP, o su desenmascaramiento, fue directamente proporcional a la caída del PSOE. La imagen arrasó, porque ya lo había hecho antes, con el proyecto.
8.- Y esta fuerza de la imagen implicó la eliminación del discurso social. Ante el crecimiento desmesurado del paro y la crisis, la izquierda consideró que su discurso fundamental no era sino la memoria histórica y algo sobre niños desaparecidos -un asunto gravísimo aunque se haya convertido en propaganda electoral-. Así, la autoproclamada izquierda fue dejando a la derecha todo terreno socioeconómico y esta, con un discurso repleto de falsedades, fue aclamada como triunfadora. No se trata de que se impusiera un pensamiento único, como se quejan lo llorones, sino que el único pensamiento, por llamarle de alguna forma, que la gente escuchaba de forma generalizada sobre la situación socioeconómica era el discurso de la derecha. Así, abandonados ante un agravamiento de la crisis cada vez peor, la gente solo escuchó una respuesta.
9.- Y todo lo socioeconómico, conviene recordarlo, fue la base desde la que se extendió la izquierda. La misma que ahora había dejado sola a la población, además a la más desfavorecida, anclándose en debates pijos sobre memoria histórica y dónde reenterrar, ¿existirá el verbo?, a Franco.
10.- ¿Y el revulsivo 15M? Ni reformista ni revolucionario. Para ser lo primero les ha faltado propuestas creíbles; para lo segundo, profundidad de pensamiento. El 15M ha acabado siendo, como era de prever, un ejército enrollado de salvación. Y, ya lo analizaremos, un lastre para repensar una izquierda reformista -y una ñoñería para una revolucionaria-.
11.- Pero, no hay que perder la esperanza. Hoy mismo, domingo ya, el periódico progresista por excelencia, a las 10 de la mañana, tenía esta portada:
Sin duda, siempre de izquierdas y con mensaje social.
y (otra vez) 0.- Lo bueno de desenmascarar los timos como la powerbalance es que dan una nueva oportunidad al pensamiento racional. Lo malo, es que tal vez quienes la usaron solo estén esperando otro artilugio aún más ridículo.
3 comentarios:
La muerte de la socialdemocracia está en la raíz de lo ocurrido en la izquierda, aunque no lo asumen.
Lo veremos pronto en las reacciones furibundas que, junto a nacionalistas de toda condición, lanzarán sobre el acuerdo europeo.
Que poco tacto tiene Sr Mesa.
Comparar el timo de ZP con la pulsera.
La pulsera es mucho mas respetable.
Un análisis muy pobre. Estaba esperándolo. Impropio de usted.
Por otra parte, y en cuanto a su comentario sobre la portad de público, sólo una cosa: si hubiera ganado el Real Madrid, y público hubiese hecho la portada equivalente con un jugador madridista, ese punto de su artículo no estaría.
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