¿Quién de nosotros no tiene una vida interior muy grande? ¿Y qué poeta no nos la cuenta una y otra vez? En esta sección mi alma se desnudará. Incluso he comprado una nueva para tenerla más grande. Porque, en el fondo, yo también quiero ser felizDebe ser muy triste estar deseando que llegue el 22 para dejar de aprender.
Y, también, es muy triste desear que llegue el 22 para dejar de enseñar.
2 comentarios:
Pues todavía peor que todo eso es que llegue el 22 y no tener ningún décimo de La Bruja de Oro o de Doña Francisquita.
Futuro miserable para sus 22's y para el mio.
¿Y si el gordo cayera en 22?
Un Oyente de Federico
Excelente apreciación, con la que coincido.
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