viernes, octubre 12, 2012

LA FRAGILIDAD DE LOS SÍMBOLOS (2)


El orgullo nacional.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Los simbolos tienen su momento, para el que fueron creados.
Si no meáramos, ¿para que servirían esas siluetas (discriminatorias) masculina y femenina en algunas puertas?

Llevamos mucho tiempo sin que suframos una guerra, demasiado, nunca en la historía de España habíamos vivido tanto tiempo en paz.
Las banderas están pensadas para distinguir los bandos en las refriegas y evitar que les pegues tiros a los tuyos. En ellas y en esos momentos condensamos todos los sentimientos solidarios.
Por eso, porque vivimos en paz, una bandera es un trapo de colores horteras con el que jaleamos a nuestros equipos deportivos.
Y ójala sea así por mucho tiempo.

Sólo en situaciones excepcionales la bandera vuelve a ser simbolo y algunos pocos, entre los que le incluyo Don Enrique, son los que entonces se atreven a izarla y a cantar la Marsellesa.

Un Oyente de Federico

Anónimo dijo...

Pues yo creo que el rojo y el amarillo combinan muy bien, querido oyente de Federico EEEEEEH EHHHHHHH EHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH EHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH