domingo, agosto 30, 2015

OLIVER SACKS: EN MEMORIA

porque se trata de pacientes que no tienen conciencia de que les haya sucedido nada, pacientes que han perdido su propia realidad, y que no lo saben siquiera, pacientes que quizás no sufran, pero que son los más olvidados de Dios.


Una cuestión de identidad, en El hombre que confundió a su mujer con un sombrero.  

Ha muerto Oliver Sacks.
Dios había abandonado a aquellos pacientes, tal vez nos haya olvidado a todos.
Oliver Sacks nunca los abandonó.

jueves, agosto 20, 2015

VIDA INTERIOR/141: ¡¡¡¡¡¡¡ROBO!!!!!!!!!

¿Quién de nosotros no tiene una vida interior muy grande? ¿Y qué poeta no nos la cuenta una y otra vez? En esta sección mi alma se desnudará. Incluso he comprado una nueva para tenerla más grande. Porque, en el fondo, yo también quiero ser  feliz.

Una vez más, me han robado el Nobel de Filosofía.
Y se lo dan a un tal Habermas y a otro que se llama Taylor.
Millón y medio de dólares.
Como dijo el filósofo: filosofar es prepararse para morir.
Pero, al menos morir rico...
¡¡¡¡¡¡¡¡Ladrones!!!!!!!!

miércoles, agosto 19, 2015

¿VIOLENCIA DE GÉNERO? ¿VIOLENCIA MACHISTA?

Nota: este artículo se publicó originalmente el 26-08-2008. Por las circunstancias actuales se vuelve a publicar cambiando los datos de actualidad.

Treinta y tres personas muertas son muchas en ocho meses. Máxime cuando estamos hablando de asesinatos que se repiten, en sus rasgos característicos, desde hace años. Y precisamente por estos rasgos característicos se ha decidido, de forma errónea y es lo que pretendemos analizar, que se trata de una violencia de género o de una violencia machista. Es decir, de hombres que de acuerdo al machismo o al género deciden matar a sus mujeres. Y es aquí donde está en realidad la clave del asunto: en ese adjetivo posesivo –ahora, creo, que se llaman determinantes-. Porque lo cierto es que esos hombres machistas y genéricos no matan a cualquier mujer sino a la que con ellos conviven: a su, de nuevo el adjetivo posesivo, mujer.

Para paliar este grave problema se realizó incluso una ley especial que se llamaba de manera explícita contra la violencia de género y que llegaba al esperpento, avalado por el Tribunal Constitucional, de diferir en la pena por el hecho de que quien hiciera el mismo acto fuera hombre o mujer. Así, en dicha ley se juzga y condena el acto no de acuerdo a las acciones del propio sujeto actuante sino de acuerdo a su pertenencia a un sexo determinado. De esta manera el mismo hecho, exactamente el mismo, recibe distinto tratamiento judicial según quien lo cometa sea hombre o mujer. Pero resulta que ser hombre no es una acción del sujeto, nadie es hombre o mujer porque lo haya decidido, sino un mero darse biológico. Y es ahí donde la ley supera el concepto de agravante. Porque el agravante, como su propio nombre indica, marca una característica de la acción que podía haber sido evitada (nocturnidad, alevosía, premeditación o, para dar una idea, ser cónyuge), pero nadie puede evitar ser hombre o mujer. Así, la ley supera el campo que debe tener una ley en democracia, juzgar las acciones delictivas, para pasar a ser ley de un estado dictatorial: juzgar condiciones de nacimiento como hicieron las leyes nazis sobre los judíos. Y cuando se juzgan estas condiciones se juzga fuera de la democracia.

Pero además, la denominación violencia de género transforma un acto individual en un acto de pertenencia a un sexo. Efectivamente, es, como se dice frecuentemente, la violencia de los hombres contra las mujeres y de hecho hasta parecido se llama el tribunal especial que juzga estos delitos. Y así hasta en la ley su propio nombre indica esto: es la “ley contra la violencia de género” (en una mala traducción del inglés). Sin embargo, aquí se comunica algo erróneo cuando no simplemente discriminatorio. Porque no existe violencia de género, violencia de “los hombres” sobre “las mujeres”. Efectivamente habrá violencia de este hombre o aquel, o incluso existirá una violencia de dominación y posesión, ahora hablaremos de esto que para nosotros es la clave, pero no habrá violencia de “el hombre” contra “la mujer” en cuanto a universal o esencia. Así, ni el género masculino (por seguir con la mala traducción) pega ni el género femenino es golpeado. Aunque aquí se podría argüir que sí es mayoría, en el maltrato doméstico, la violencia de hombres sobre mujeres (obsérvese que hemos eliminados “los hombres”) y sería cierto. Pero del mismo modo que es también cierto que la mayoría de los terroristas de ETA son vascos y a nadie se le ha ocurrido una ley sobre “Terrorismo vasco”, no comprendemos la causa de que sí se les haya ocurrido una sobre violencia de género (¿o sí?, ya veremos).

Pero, ¿es una violencia machista? El machismo se podría definir como la teoría que defiende la inferioridad intelectual de la mujer sobre el hombre. Sin duda, hay machismo en la violencia doméstica contra mujeres pero no es esta la clave del problema. Y se ve bien cuando se comprende que el machismo tradicional español, que no se debe confundir con la necesaria cortesia, ha sido siempre tratar mucho mejor a las mujeres que a los hombres por considerarlas incapaces y tener la idea clara de que nunca se podía pegar a una mujer. Así, el machismo español, violento frente al otro hombre que si no pegaba era un afeminado, era sin embargo cuidadoso con la dama. Aunque no por ello dejara de ser repugnante moralmente.

Pero es que encima, y en tercer lugar, la violencia no tiene su causa en el género ( o sea, el sexo socializado) ni en el machismo sino que en la idea de propiedad. Efectivamente, el hombre que pega a su mujer no lo hace porque sea mujer o porque la considere inferior, sino porque es su mujer, es decir: le pertenece para su conciencia primitiva. Si la violencia fuera de hombre sobre mujer sería sobre cualquier mujer pues la relevancia estaría, precisamente, en el sexo. Sin embargo, no se ejerce de forma indiscriminada sobre el sexo femenino sino sobre personas concretas que mantienen lazos familiares determinados (es decir, sobre el cónyuge o la pareja). Por ello, la idea clave del asunto no es el sexo (hombre/mujer) sino la idea de propiedad y dominación. El agresor piensa: si es mi mujer me pertenece y debe obedecerme. Es precisamente ese concepto de propiedad privada, y que está detrás a su vez en la defensa de la idea de que los padres son los únicos que tienen derecho a educar moralmente a sus hijos, el que está detrás de todo el asunto. El individuo mata a su mujer como quién se deshace de un mueble viejo o hace con su perro o sus hijos lo que quiere porque para eso son suyos.

Y aquí es donde usted, lector, espera la diatriba contra el malvado capitalismo que es, en el fondo, el culpable de esto. Pero, no. Sino al contrario en esta ocasión. Pues entonces, y si de acuerdo al capitalismo, la propiedad privada es la clave de la producción, ¿por qué el maltrato no está más extendido? Pues por dos motivos.

El primero es porque hay que negar la mayor: la propiedad privada no es la clave del capitalismo sino uno de sus componentes, y no el más importantes. El segundo, porque no hablamos aquí, en el tema de la violencia doméstica, del concepto de propiedad privada del capitalismo actual sino de la propiedad privada de las sociedades atrasadas cuyo ejemplo paradigmático sería la propiedad de la tierra. Efectivamente, la propiedad capitalista es una propiedad de especulación, de aumento de producción y acumulación de riqueza: de proyecto. En cambio, la propiedad de la tierra implica la posesión personal del terruño y su explotación para la supervivencia en la absoluta subsistencia: sin cambios. Así, las relaciones de posesión en la economía precapitalista son de dominio sobre el objeto tal y como ya es, generalmente sobre recursos naturales o sector primario, mientras que en el capitalismo son de desarrollo del mismo, cuyo ejemplo sería la fábrica o el deseo de que los hijos sean más que los padres –incomprensible para un individuo anterior y que sin embargo tiene mucho de hermoso-. Y esta forma primera de posesión ramplona y primitiva es la que ronda la cabeza del maltratador y su ideal de familia. Así, el problema real no es el machismo, pues el machismo autóctono de hecho sería el del caballero español siempre gentil con su dama por considerarla incapaz, ni el género, sino la dominación por la idea de propiedad. Y por ello, precisamente porque la propiedad de estructuras precapitalistas es la que funciona aquí, son las mujeres inmigrantes, las más amenazadas estadísticamente. El atraso social en el desarrollo capitalista trae sus consecuencias en la socialización.

No es pues el machismo el que mata ni el ridiculo tema del patriarcado, que más tiene que ver con la fuerza productiva en sociedades no tecnológicas que con oscuros elementos machistas atávicos, sino la idea de propiedad precapitalista. Así, mientras que las relaciones personales actuales son líquidas, como bien señala Bauman, de acuerdo al propio auge del mercado permanente y ya no requieren la consistencia y la perpetuación, las relaciones personales anteriores son de propiedad en su sentido más primitivo: No codiciarás la casa de tu prójimo, no codiciarás la mujer de tu prójimo, ni su siervo, ni su criada, ni su buey, ni su asno, ni cosa alguna de tu prójimo (Éxodo 20, 17). Es decir, la posesión, como cualquier otra cosa, en las relaciones personales. Porque aquí el capitalismo, como siempre cuando se compara con el pasado, no es opresor sino liberador y superior moralmente a las formas pretéritas. Y ello no quiere decir que las formas de relación personal actuales sean buenas, puro flujo de mercancías, pero sí que no se es anticapitalista por el pasado sino por el porvenir.

Pero, por último aunque no menos importante (en mala traducción del inglés para seguir la moda) queda un factor clave: ¿y por qué llamarla violencia de género o machista? Pues porque interesa la farsa a determinados lobbys, en este caso concreto ciertos grupos feministas, que al presentar todo como un entramado machista solo defienden sus intereses de élite. Y es este, efectivamente, un tema preocupante en la democracia. Porque estas agrupaciones de intereses formadas por grupos de presión, que pueden ser útiles en su lucha concreta, sin embargo comienzan a olvidar algo fundamental: que los intereses particulares no pueden situarse por encima de los derechos generales. Y así, los derechos de la mujer no se pueden defender sobre la base de una mengua de derechos no ya de los hombres (por testículos y ante la ley) sino de los derechos humanos (por racionalidad). Así, el lobby lo que puede acabar buscando no es la liberación sino que las condiciones de privilegio permanezcan pero cambiadas y beneficien su propio elitismo frente a la chusma (que la conforman el resto de hombres y, también, el resto de mujeres. O dicho de otro modo: entrar en el status quo sin que este cambie, aunque ahora tenga cierta mirada femenina (854.000 entradas en Google).

lunes, agosto 03, 2015

TENER PERRO

Es interesante que el primer animal domesticado por el ser humano haya sido el perro. Efectivamente, si hemos de hacer caso a las investigaciones y debemos hacerlo porque saben más que nosotros, el perro convive con los seres humanos desde hace más de 15.000 años. Y decimos que es interesante porque puede comprenderse desde el ámbito puramente utilitario que hubiera animales que fueran domesticados con la finalidad de la ganadería y para conseguir productos alimenticios. Pero no es la utilidad, o al menos no es la única razón, por la cual ser humano y perro conviven desde hace tanto tiempo y siguen haciéndolo.

¿Por qué tener perro? Es absurdo pensar que la gente que tuvo perro  durante siglos no tuvo también una razón utilitaria. Sin embargo, resulta a su vez interesante que una vez ha pasado esa necesidad, en la inmensa mayoría de los casos, la gente siga teniendo perro. Por tanto, la pregunta mantiene su sentido.
                                              
Evidentemente, y en primer lugar, el perro significa compañía. Día a día, en los parques o en las calles se puede ver a ancianos cuyo único compañero es su mascota y cuya única obligación para levantarse y salir a la calle sin quedarse para siempre en su piso es tener que bajar a un cuadrúpedo a hacer sus necesidades y pasear juntos. El perro así no es ya sólo un complemento de la vida, como podría ser el coche o un bolso, sino un compañero en la misma.  

Pero hasta aquí parecería que aún perdura el interés para tener perro: me acompaña. Y, sin embargo, hay algo más.  Efectivamente, deberíamos preguntarnos, y preguntarme, por qué nos da más lástima un perro abandonado que un vagabundo. Tal vez sea porque consideremos, equivocadamente o no, que un ser humano podría ampararse por sí mismo mientras que un perro es un animal que nos necesita. Y tal vez en la idea de que el perro nos necesita, en ese pensamiento de que hacemos falta al animal, radique la clave de toda la relación de convivencia entre los perros y los humanos. Mientras que el gato se nos presenta como un animal independiente, el perro se nos figura como un animal dependiente, como un niño que nunca va a crecer y que por eso mismo necesita nuestro cuidado. El perro nos pide ayudarle en su desamparo.

Sí nos pusiéramos filosóficos podríamos señalar que en el perro vemos la propia limitación de la realidad, vemos la naturaleza como algo inconcluso y que sólo puede ser terminado por nuestra propia racionalidad dotándole de un sentido. En la mirada del perro al inclinar la cabeza hacia un lado demostrando no haber entendido nada de lo que ha pasado no podemos sino ver la idea de que sólo la racionalidad puede darle sentido a la realidad y que por esa idea de desamparo en lo natural nos sentimos llamados a ir al auxilio del ser que está desamparado. Superar lo que para la naturaleza sólo es selección natural para ayudar al desamparado está también en tener perro. Tenemos perro para ir más allá de la naturaleza. Tenemos perro para, también, humanizar el mundo.

Pero, a veces, filosóficamente debemos no ser filosóficos. Tener perro es también sentarte, que alguien venga hasta ti y se tumbe a tu lado. Porque sí. Porque el mundo es así un lugar mejor: más humano. Y volvimos a filosofar.

Hay gente que dice que los perros son mejores que las personas. Se trata sin duda alguna de un error doble. Por un lado, es un error en la esencia de la propia relación pues los dos elementos de la misma son incomparables. Efectivamente, es equivocado intentar comparar la bondad de un ser humano, que viene dada por el empleo de su propia libertad al menos en una gran parte, con la fidelidad del perro, que viene dada por su propio instinto. El segundo error es pretender dotar al perro de sentimientos humanos situándolo así en el fenómeno que se llama antropomorfización. Ciertamente, los perros no son seres humanos sino sólo perros. Pero son, nada más y nada menos, que perros. Y les queremos porque no son humanos sino perros.

Nuestro perro se llamaba Ethan Edwards. No es difícil averiguar que era un homenaje a esa obra de arte que es Centauros del desierto, de John Ford. Sinceramente diré que no era el más listo y en varias ocasiones nos ocurrió que él pasaba por un lado de una farola, yo por el otro y la correa se quedaba enganchada en el medio impidiéndole continuar y quedándose sin saber qué hacer. Orgulloso, reconozco que yo tardaba menos en solucionar el problema.

Ethan tenía diecisiete años y dos meses y quince días. El pasado 30 de julio, a las 4’20 de la madrugada lo sacrificamos para evitar su sufrimiento por una enfermedad repentina. Incluso en eso cuidamos su desamparo y fuimos contra la naturaleza, maestra de la indiferencia. Incluso en eso el perro, nuestro perro, nos hizo humanos.

Hay gente que cree que la muerte es un tránsito: la superstición es libre. Ethan Edwards ha dejado de existir. Han pasado 13.700 millones  de años desde el inicio de nuestro universo. Diecisiete años no son, desde luego, muchos en comparación. Pero, qué duda cabe, al caminar por la calle y pasar junto a una farola se echa de menos ayudarle a resolver por qué lado salir de ella.

Adiós, Ethan Edwards.           




domingo, agosto 02, 2015

LO QUE DA LA LOMCE

Averigüe usted, querido lector, cuál de estas dos teorías es de obligada oferta en cada curso según la LOMCE.

a) Esta
b) O esta otra

Ya lo saben ustedes: esto se llama excelencia educativa.

miércoles, julio 22, 2015

domingo, julio 19, 2015

CARTA DE UN FUNCIONARIO AL PRESIDENTE DEL GOBIERNO

Señor Presidente del Gobierno
Mi nombre es Enrique P. Mesa García y soy funcionario del cuerpo de Profesores de Secundaria.
Me he enterado por la prensa que está usted pensando en devolvernos a los funcionarios la paga extra que nos sustrajo y además en subirnos el sueldo. Curiosamente, bueno usted y yo tenemos estudios y sabemos que esto es una figura retórica, esta decisión ocurre justo antes de las elecciones. Pero como usted no es un populista sino un oligarca no mezclaré  temas.

Señor Presidente del Gobierno,
lo que deseo aclararle en primer lugar es que si bien estaría encantado en recuperar mi legítima posesión puede usted guardarse su botín. Lo llamo botín porque llamarlo ahorro hubiera implicado que su gobierno lo hubiera empleado en un uso social justo pero solo recuerdo que hay un 40% más de ricos y que la renta media, y observe que no pongo “sin embargo”, ha vuelto a los niveles de 1998. Efectivamente, ha sido un botín.

Señor Presidente del Gobierno,
puede que usted está acostumbrado a tratar con gente cuya máxima es el beneficio individual pero esta vez se ha equivocado. Ahora, sin duda, usted espera una charla desde mi dignidad personal y mi excelsa moralidad: pero ahí también se equivoca. Porque Señor Presidente del Gobierno, usted y yo tenemos la misma dignidad personal e incluso la misma dignidad moral -aunque créame que con ello no estoy afirmando nada necesariamente elogioso-. Así que le aseguro que el asunto no es personal.

Señor Presidente del Gobierno,
yo soy un profesional y soy funcionario. Ser funcionario puede parecer, y permítame el lenguaje, un chollo: muchísimas ventajas y casi ningún inconveniente. De hecho, no le mentiré, conozco funcionarios basura. Pero ser funcionario en democracia debe ser la más noble tarea social que se puede tener: damos fe de un estado que es del pueblo, por el pueblo y para el pueblo. Todos los trabajos tienen una dignidad, sin duda, pero ser funcionario es algo más que un trabajo: es un ejercicio de y para la democracia.

Señor Presidente del Gobierno,
usted está intentando comprarme. Es ingenuo pensar que no me gustaría recibir en mi cuenta bancaria un aumento salarial o la paga extra que me sustrajo –verá que fino hablo- pero ya le he señalado que no escribo aquí desde lo personal, podemos discutir en otro momento mi precio, sino desde algo que está más allá de la mera subjetividad. Este algo que está más allá es mi condición de funcionario de un Estado democrático que me impide aceptar su limosna por creer que lo que los ciudadanos deben tener no es un estado caritativo y subsidiario con funcionarios satisfechos y comprados sino un estado social y democrático de derecho.

Señor Presidente del Gobierno,
tal vez usted se sonría al oír eso de estado social y democrático de derecho. Cuando yo llegué a mi cargo, que fíjese que tampoco es muy alto pues sólo soy profesor, prometí defender al estado y a la Constitución como ley fundamental. Y no sé si le suena que ésta, en su artículo primero, dice que España se constituye como un estado social y democrático de derecho.

Señor Presidente del Gobierno,
usted considera, al negociar para devolverme un dinero particular, que lo que usted me ha robado es un sueldo, una mera retribución económica. Sin entrar aquí en disquisiciones filosóficas sobre el trabajo asalariado, me gustaría señalar algo. La única forma que tiene usted de devolverme lo que me ha quitado es que su gobierno deje de dirigir este país y que cese el Proceso de Precarización que ustedes han llevado a cabo reduciendo drásticamente los derechos sociales y políticos de la población española. Usted me robó la paga extra, permítame la figura retórica, y su gobierno me ha robado los derechos sociales y políticos, a veces hablo sin retórica. Quédese con lo primero si le place, pero no pretenda que no le exija lo segundo.

Señor Presidente del Gobierno,
ustedes, y cuando digo ustedes me refiero al gobierno del Partido Popular, han incumplido sistemáticamente el mandato constitucional de defender a España como un estado social y democrático de derecho y mi obligación como funcionario es recordárselo. Por todo ello le exijo que si quiere devolver aquello que nos ha robado vuelva a situar los derechos políticos y sociales como una realidad en este país. Como para ello considero que va a resultar indispensable que ustedes pierdan de forma abrumadora las elecciones próximas solo puedo coherentemente desear no volver a verle nunca como Presidente del Gobierno.

Señor Presidente del Gobierno,
espero que a partir de noviembre nunca tenga más, ni a usted ni a ningún representante de este Partido Popular, que volver a llamarle Presidente del Gobierno. Pero si desgraciadamente ustedes vuelven a gobernar yo seguiré siendo profesor. Y no lo dude: cada día cumpliré con mi obligación de funcionario al explicar a mis alumnos que España debe ser un estado social y democrático de derecho y educarles para que trabajen por ello. Y con ello, al defender la Constitución y educarles lo haré necesariamente contra su proyecto de precarización.

Señor Presidente del Gobierno,
ya le digo que no es algo personal; sólo es mi trabajo.

lunes, julio 06, 2015

EMPIEZA (otra vez) SAN FERMÍN

Empieza San Fermín.
Vomitar borracho y torturar y matar animales.
Bienvenido a las tradiciones populares.
No hay nada como ser un paleto.
Y esta vez…, ¡¡con más banderas!!

GRECIA DICE NO/ y 2

Y que el gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo no desaparecerá de la Tierra.

Abraham Lincoln, discurso de Gettysburg.

domingo, julio 05, 2015

GRECIA DICE NO/1

Tenemos un régimen político que no se propone como modelo las leyes de los vecinos, sino que más bien es él modelo para otros. Y su nombre, como las cosas dependen no de una minoría, sino de la mayoría, es Democracia.

Discurso de Pericles recogido por Tucídides en Historia de la Guerra del Peloponeso.

viernes, julio 03, 2015

GRECIA, REFERÉNDUM Y PROCESO DE PRECARIZACIÓN

Es ingenuo pensar que la épica debe ser utilizada en política. Es más, la mayoría de las veces resulta reaccionario. Sin embargo, a veces recurrir a ella puede ser un buen ejemplo. En el siglo V antes de Cristo los griegos formaron Occidente al oponerse al avance del Imperio Persa en las Guerras Médicas. Por supuesto, su idea no era crear occidente ni generar el pensamiento racional: no hubieran luchado por tal cosa. Pero, al luchar contra el avance persa lo hicieron.

Lo que actualmente está ocurriendo con Grecia y eso que se llama Unión Europea merece cuando menos un comentario. Y este comentario sólo puede hacerse precisamente desde aquello que los propios griegos clásicos nos enseñaron: el uso desapasionado de la argumentación racional. Por ello que nadie espere ver aquí una historia de buenos y malos,  exaltación ridícula al sistema o al antisistema.

El planteamiento del problema no es, sin embargo, muy claro pues no se trata de quién es el culpable de lo que ahora está ocurriendo en Grecia sino otra aparentemente más simple: ¿qué está ocurriendo realmente con Grecia? Pero a veces las preguntas muy simples necesitan respuestas muy complejas y, sin duda, esta es una de esas ocasiones. Porque al preguntarnos sobre lo que ahora está ocurriendo en Grecia no podemos referirnos sólo a la celebración del referéndum del próximo domingo sino también a las causas que han llevado a todo este proceso. O diciéndolo de otro modo, porque el domingo va haber un referéndum en Grecia sobre su acuerdo con eso que se llama Unión Europea necesitamos saber realmente qué se está votando.

Empecemos por el principio. No cabe duda de que los principales responsables de la situación que produjo el rescate de Grecia están en Grecia –bueno, o en Suiza-. Pero es importante distinguir entre quienes están en Grecia y todos los griegos, pues necesariamente no es lo mismo: no hay que tomar la parte por el todo. Efectivamente, los anteriores gobiernos griegos son responsables del cúmulo de despropósitos que llevaron a Grecia a una total y absoluta bancarrota. Hasta ahí creemos que está claro.

Pero, el problema no concluye ahí sino que continúa. Y lo hace con las medidas impuesta por la Troika para solventar presuntamente el problema de la deuda griega. Las medidas se pretenden reducir a una palabra: austeridad. Pero es una palabra equívoca porque la clave no es esa sino precarización.

Los problemas se pueden analizar de dos maneras: o a través de ceñirnos estrictamente al mismo o  buscando una explicación más amplia.

Si empleamos la primera acción y nos ceñimos estrictamente a lo concreto y limitamos nuestro análisis nos resulta que la Troika es una incompetente. En primer lugar, se ha equivocado permanentemente en sus predicciones. En segundo lugar, sus recetas, que Grecia y toda Europa han seguido hasta que recientemente el Banco Central Europeo rectificó, han resultado un fracaso absoluto. Tercero, todos sabemos que la deuda griega es inasumible. Visto así, en el campo estrictamente de la ortodoxia económica, la Troika tenía que ser despedida por inútil.

Pero, resulta extraño pensar que un organismo tan importante como el Banco Central Europeo, el Fondo Monetario Internacional y la Comisión Europea sean tan inútiles. No resulta por tanto pensar esto, todo se puede achacar a la incompetencia, una solución aceptable. Efectivamente, si todos sabemos que las medidas impuestas por la Troika han sido inútiles resultaría absurdo que si el objetivo último era que Grecia pagara su deuda y entrara en la prosperidad las medidas no hayan sido cambiadas hace tiempo. Es decir, ¿por qué entonces se mantiene  el discurso de la Troika?

El análisis demasiado concreto no nos parece haber ayudado demasiado. Pero la apariencia una vez más engaña porque siguiéndolo hemos concluido una interesante pregunta: ¿por qué mantener durante años una propuesta que todos sabíamos que era inútil? Es decir, hemos perfilado nuestra pregunta y la hemos concretado: ya no es ¿qué está ocurriendo en Grecia? sino ¿por qué se mantiene una propuesta fracasada y sin futuro por parte de la UE?

Lo inútil lo es en referencia a algo pues no existe como término absoluto: nada es inútil para todo. Pero además, si algo se mantiene por parte de gente preparada debe ser para algo. Y tal vez el error del análisis es que estamos juzgando erróneamente el objetivo de la Troika. Efectivamente, este objetivo no es salvar Grecia sino otro distinto. Y quizás, presentando otro objetivo todo acabe encajando.

¿Cuál podría ser ese nuevo objetivo? Hemos hablado repetidas veces en este lugar de lo que denominamos como proceso de precarización. Llamamos así a un hecho que está ocurriendo fundamentalmente en los países europeos, pero que se va a extender a otros países desarrollados, y que consiste en que por fin la oligarquía es capaz de bajar las condiciones de vida de forma general para la población porque el consumo puede sustituirse por los nuevos consumidores que traen los países emergentes. Hasta ahora el nuevo capitalismo necesitaba una Europa próspera para establecer ciertas condiciones de consumo a través de la renta media de sus habitantes, pero este hecho puede ser sustituido ahora por una minoría de las poblaciones emergentes que, aún siendo minoría, resulta más numerosas que todos los habitantes de la Unión Europea juntos. Y ahora este proceso permite inmediatamente rebajar las condiciones económicas y sociales de la población europea y aumentar el beneficio de la oligarquía.

Como ya hemos hablado varias veces aquí de este proceso no vamos a repetirlo sino que lo que vamos a ver es si realmente esta hipótesis podría explicar perfectamente el problema que ha surgido con Grecia. Y lo queremos ver en un doble sentido: por un lado, hablando en términos económicos; por otro, analizándolo en sentido político.

Hablando en términos económicos, ya hemos visto cómo las recetas de la Troika han resultado inútiles para generar una situación estable y por lo tanto una base para la prosperidad en Grecia –y tampoco en Europa-. Sin embargo, estas recetas, que se han extendido a lo largo de toda Europa, lo que sí han permitido es acentuar ese proceso de precarización con pérdida del poder económico por parte de la mayoría de la población unido a la pérdida de derechos sociales y políticos. Por lo tanto, económicamente las medidas adoptadas por la troika son inútiles si pretendemos salvar a Grecia o mejorar la condición de vida de los ciudadanos europeos pero son extraordinariamente útiles cuando lo que se pretende es extender un proceso ya iniciado de precarización que favorece a la oligarquía europea. Y se mantienen.

Hablando en términos políticos el problema es similar. La llegada de Syriza al poder ha resultado un auténtico fiasco para la tranquilidad política que esperaba a la Unión Europea en la ejecución de este proceso de precarización pues hasta entonces ningún gobierno se había ni tan siquiera atrevido a defenderse de él. El mejor ejemplo de la servidumbre de los gobiernos lo tenemos curiosamente muy cerca y no hay que irse a la península Helénica para verlo sino quedarnos en la Ibérica. Efectivamente, Zapatero cambia radicalmente su política social al recibir la famosa carta –en realidad manual de instrucciones- del Banco Central Europeo donde indican exactamente los pasos a seguir en la nueva política para cumplir el proceso de precarización. Y estos pasos, Rajoy acabara de culminarlos incumpliendo para ello claramente su programa electoral. Así las cosas, la calma política era total hasta que el pequeño gobierno griego cae en manos de lo que la prensa califica como radicales, traducimos a socialdemócratas de toda la vida, y que conlleva por primera vez una respuesta frente a la pretensión de la Unión Europea de gobernar los distintos países de acuerdo al proceso de precarización. Y como el emperador darío, cuenta la leyenda, llevaba a un esclavo que le recordaba permanentemente la existencia de Atenas como territorio hostil, la Troika decidió dar un escarmiento.

Efectivamente, toda negociación de Unión Europea con el gobierno de Atenas ha estado marcada por un inmovilismo absoluto en las condiciones europeas aun sabiendo que eran claramente imposibles de cumplir. En realidad esto ha sido así porque la troika no estaba negociando realmente con Grecia sino que estaba dando una lección de ejemplaridad al resto de la población europea señalándoles que cualquier salida de tono por mínima que fuera, es decir: aplicar políticas socialdemócratas, iba a ser imposibilitado desde los organismos superiores y que por tanto en aquellos países donde iba a haber elecciones próximamente, y entre ellos se cuenta España, iba a dar igual el resultado de las mismas pues la Unión Europea ya definido la política económica a seguir.

Así, lo que ha pretendido la Troika en toda negociación con Grecia es inutilizar las urnas y el voto de los ciudadanos como un elemento de desarrollo de políticas sociales o económicas. Es decir, lo que la Troika ha demostrado en la negociación es que no quiere la democracia como modelo político sino que pretende generar una oligarquía que defina la política económica y esta meramente sea cumplida por los ciudadanos eliminando los procesos democráticos y gobernando desde instituciones que carecen de cualquier proceso electivo. Es, en definitiva, la defensa y desarrollo del proceso de precarización – económico, social y político- sobre los intereses de los ciudadanos europeos.

Pero, Grecia y su nuevo gobierno empezaban a molestar. ¿Y cuál ha sido la gota que ha colmado el vaso para esa misma troika autosatisfecha en el desarrollo del proceso de precarización? Esta gota ha sido el anuncio por parte de Tsiripas de un referéndum para votar sobre la propuesta, no de acuerdo sino de rendición, presentada por la Troika para Grecia. Lo que ha indignado a la oligarquía Europea es que los griegos se atrevan a votar aquello que la propia oligarquía ha decidido hace tiempo que se debe hacer. Lo que ha indignado a la oligarquía es en el fondo que sigue existiendo la democracia.

Cuando uno está en guerra no debe mirar a sus aliados con lupa esperando que todo lo que produzcan sea sumo bien y decisiones absolutamente correctas.
Puede ser que nos parezcan erróneas las condiciones en que se ha presentado el referéndum en Grecia y que existan varias cosas que nos pueden no gustar del Gobierno de Syriza, pero no hay una sola cosa que nos guste del proceso de precarización.
Podemos dudar de la estrategia del gobierno griego, pero estamos convencidos de que la Troika no es un apoyo para la democracia.
Podemos creer que Grecia se ha equivocado en las negociaciones, pero sabemos con certeza que la Troika lo único que pretende es desarrollar un proceso que empobrece económica social y políticamente a todos los habitantes de Europa.

En el siglo V antes de Cristo, Grecia paró al Imperio Persa y con ello inició un proceso que culminó en la Ilustración y en las ideas de la democracia. Hoy Grecia sola no puede parar el proceso de precarización que se está imponiendo desde la oligarquía Europea a los habitantes de nuestro continente. Por ello, es necesaria la creación de una izquierda auténticamente europea que, lejos de lo paleto y nacionalista, comprenda que nuestro territorio político, social y económico es, y como mínimo, el continente europeo y que por tanto nuestra lucha social y política es toda Europa. Este proyecto europeo de izquierdas no es una utopía sino una necesidad si lo que queremos es mantener aquello que se inició en el siglo V antes de Cristo y que, con todos sus fallos, ha llevado al mayor progreso de la humanidad. 
No se trata de revivir las danzas tribales, se trata de desarrollar la libertad.

jueves, julio 02, 2015

UNA CIERTA HUMANIDAD (sobre Irene Villa)

Es una novela inolvidable: Tiempo de silencio. Y dentro de ser inolvidable hay unas páginas breves que describen exactamente la humanidad auténtica. En ellas, una mujer acostumbrada a sufrir salva al médico protagonista de ir a la cárcel por un aborto señalando brevemente que "él no fue". Están  fabricados de una tierra apenas modificada: lección de humanidad. 

De todo el caso Zapata, la mejor lección la ha dado sin duda doña Irene Villa quitando importancia al asunto de que un idiota haga miserables chistes sobre una niña de entonces 12 años a la que los asesinos de ETA le volaron las piernas. Y sobre unas niñas de 14 y 15 atrozmente asesinadas.

De todo el caso Zapata, la mejor lección la ha dado sin duda doña Irene Villa negándose a seguirle el juego a un montón de gentuza que quería utilizar su dolor como arma política.

Probablemente si algún día habláramos doña Irene Villa y yo no estaríamos de acuerdo en nada. Pero hay lecciones de auténtica humanidad que conviene resaltar.

Irene Villa nos ha dado una.

miércoles, julio 01, 2015

VIDA INTERIOR/ 140: SE ACABARON LAS CLASES

¿Quién de nosotros no tiene una vida interior muy grande? ¿Y qué poeta no nos la cuenta una y otra vez? En esta sección mi alma se desnudará. Incluso he comprado una nueva para tenerla más grande. Porque, en el fondo, yo también quiero ser  feliz.



Pero igual, o no, el año que viene más...

lunes, junio 29, 2015

LA REVOLUCIÓN DEVORA A SUS HIJOS (y un poquito a Zapata)



Hay un dicho clásico en historia: la revolución devora a sus hijos. Con él se quiere decir que los movimientos convulsos acaban eliminando a sus propios organizadores,  acusándoles de aquello que ellos mismo criticaron en los antiguos dueños del poder. Es precisamente eso que popularmente se conoce como darle  la vuelta a la tortilla, pero como queda mucho más culto decirlo de la forma precedente entonces titulamos: la revolución devora a sus hijos.

El caso Zapata es un tema más interesante de lo que parece. Y lo es sin necesidad de sacar los pies del tiesto, o sea y otra ver en culto: sin desenfocar la hermenéutica como ha hecho recientemente Santo Juliá, tan acertado otras veces. El asunto no tiene tanto que ver con el antisemitismo o la burla al dolor de las víctimas, sino con algo diferente.

En primer lugar, ¿qué demuestran los tuis? Que Zapata tiene urgentemente que volver a la ESO para que le expliquen ciertas cosas sobre las redes sociales. Todos, yo me sé alguno buenísimo, henos contado chistes del holocausto o de humor negro. Todos hemos sido maledicentes alguna vez o hemos hecho acusaciones falsas. Pero no se nos ocurre gritarlo en una plaza o en mitad de la calle. E Internet es un lugar público. Pero, ¿no es eso hipocresía? No, eso es inteligencia social suficiente para distinguir entre vida pública y privada. Los niños hacen caquita en público sin  problemas, pero cuando crecen van al retrete, y el resto se lo agradecemos. Y nadie nombraría concejal de cultura a un niño. Ni tan siquiera siendo de la nueva política.

Pero,  Zapata ha aducido en su defensa que todo esto era en torno a un debate sobre el humor negro. En primer lugar, hay que decir que hay gente capaz de debatir en 140 caracteres, lo que señala sin duda la profundidad  de sus argumentos y ahonda en su capacidad de acción intelectual. Pero resulta curioso que Zapata no haya sacado un solo tuit de ese debate cuando hubiera sido bien sencilla. Y aquí no cabe la excusa de que se trataba de una conversación  privada pues su twitter era público. Por tanto suena a excusa. Todos, al fin y al cabo, hemos contado chistes improcedentes, aunque no todos vamos a ser concejales, o íbamos a ser, concejales de cultura.

Pero decir estas obviedades sería como no decir nada si aquí concluyeramos. Es cierto, sin duda, que es hacer el tonto publicar esos tuis y quien hace tanto el tonto no puede ser concejal por su peligrosidad –y esa es la única razón-.  Pero sin duda es cierto que hay mucho más.


Efectivamente hay algo más interesante aún y es que entre los tuits de Zapata no hay ninguno políticamente incorrecto para la autoprodamada izquierda. Me sé yo uno de mujeres maltratadas buenísimo y otro de fosas y guerra civil desternillante. Incluso uno de Lasa y Zabala que te partes la caja. Pero Zapata solo se sabe chistes sobre judíos, para cualquier buen autoproclama izquierdista judío es igual al criminal estado de Israel, o sobre víctimas de ETA. Es decir, Zapata tiene un límite claro en el humor: los suyos. Para eso sobraban hasta caracteres en twitter porque ya le hemos solucionado su polémica sobre el humor negro -pero en 659 caracteres y no nos cabría en un tuit- .

Pero hay algo más sugestivo aún: cómo la revolución devora a sus hijos. La autodenomina nueva política se ha caracteriza por dos hechos fundamentales: el primero, por carecer de discurso ideológico; el segundo, por presentar un encendido, y como tal elemental, discurso moral.

La primera se ve perfectamente reflejada en el cambio de programa de Podemos o en los recientes pactos de Ciudadanos con el PP. La nueva política no tiene discurso político propio y, más interesante, no poseerlo es una decisión consciente y voluntaria. Mientras que los partidos tradicionales se han ido desideologizando, los de la nueva política han nacido así: la era posmoderna.

Pero la segunda es la que aquí más nos atañe. El único contenido de la nueva política es la autodenominada regeneración demócrata: un discurso moral que no atañe tanto a un análisis  que pretenda ser objetivo sobre la creación de unas instituciones donde se dificulte la corrupción y estén al servicio de la sociedad como a la idea subjetiva de que los políticos deben tener un perfil personal determinado de absoluta honradez y de eso que se llama vocación de servicio. Este perfil personal, en el lenguaje de Podemos no ser casta –pero, ¿qué es la casta?-  y en el de Ciudadanos, aún más elemental, ser jóvenes, implica a su vez una moral de vigilancia permanente: todo lo que se haga o se haya hecho podrá ser tomado en su contra. Y  la moral de vigilancia lleva a una sociedad de sospecha: todo el mundo político es culpable hasta que se demuestre lo contrario. La subjetivación del análisis político hace a este irrelevante intelectualmente pero emocionalmente poderoso. Y un discurso emocional permite un ascenso rápido en las encuestas.
Casta mala, políticos viejos malos.
Nosotros buenos y puros.
Y además jóvenes y guapetes.

¿Qué le ha ocurrido en definitiva a Zapata? Que le han administrado su propia teoría de la pureza absoluta. Efectivamente, a Zapata no se le juzga por su labor como concejal de cultura, pues no ha habido tiempo para ello. Tampoco se le ha juzgado por su programa electoral -bueno, ahora es una lista de sugerencias-. Ni tan siquiera se le ha juzgado porque sea tonto, o lo parezca, y eso le incapacite para cualquier cargo. No, Zapata no puede ser concejal de cultura porque es mala persona y se burla del dolor de las víctimas. Y lo divertido del caso es que seguramente Zapata piense que los miembros de la casta son mala gente que disfrute viendo pobres en el país.  Es lo que se llama politología avanzada -por cierto, muy bien remunerada y desde aquí ofrezco mis servicios-. E incluso la fiscalía -que evita inculpar al PP por financiación ilegal o a la infanta, ambos delitos objetivables- busca inculpar a Zapata por ser tan malísima persona: porque malos, no.

Y por fin lo mejor. Todo esto no es sino un triunfo hegemónico, a veces yo también me hago un errejón, de la autodenominada nueva política. Efectivamente, las nuevas formaciones han conseguido llevar el debate a sus términos de moralidad simplona, con el encanto de la vieja política entusiasmada por el cambio y no entrar en disquisiciones sociopolíticas. Así,  todo el debate se ha centrado en los tuits de Zapata y no, por ejemplo en que Carmena señale que el programa no es sino una lista de sugerencias: tan parecido a Rajoy. La politología afina sus análisis: tú malo y yo bueno.

¡¡¡La nueva política ha triunfado!!!
¡¡¡La cabeza de Zapata rueda para que la revolución avance!!!
Pero retomando a Marx: una vez como tragedia y la otra siempre como farsa.

miércoles, junio 17, 2015

ANTE EL ERROR EN LA PAU DE FILOSOFÍA

Como todos saben, digan que sí, ha habido un error en el examen de selectividad de Filosofía. Ante esto, las tres principales asociaciones de Madrid -la SEPFI, la Plataforma y aquella de la que soy presidente la Asociación de Profesores de Filosofía de Madrid (APFM- hemos mandado un escrito a todos los centros, públicos y privados, informando del problema. Aquí lo reproduzco.

Estimado/a compañero/a:

Nos ponemos en contacto contigo para informarte de la irregularidad que ha sucedido en el examen de Historia de la Filosofía en la PAU de junio. Es posible que ya sepas que el texto de Aristóteles que aparecía en la opción B no pertenece ni al Libro II ni al X de la Ética a Nicómaco, es un fragmento del Libro I que, como recordarás, no es uno de los textos obligatorios para la PAU.

Desde el primer día algunos profesores reparamos en esto y estuvimos en contacto, esperando una aclaración por parte de los correctores. En la reunión con ellos todavía no se habían dado cuenta del error.

Con independencia de la mayor o menor dificultad del texto, es evidente que trabajamos unos textos que se nos imponen como obligatorios pero que, al mismo tiempo, permiten que el alumnado (especialmente los estudiantes que tienen mucho interés y necesitan nota) conozca los textos que pueden entrar en el ejercicio de selectividad y vaya más seguro al examen. Si la coordinación da unos textos,  lo lógico es que los utilice para el examen.

Como la noticia ha corrido, algunos correctores y representantes de centro nos entrevistamos el 11 de junio con el coordinador de la UCM, Antonio López Molina.  Por nuestra parte, y en vista de que algunos alumnos  se habían quejado de la dificultad del texto y de que no les sonaba el ejemplo y ante la posibilidad de que esto les hubiera llevado a elegir la opción A (Rousseau),  llevamos una propuesta para evitar problemas y reclamaciones innecesarias. Lo que propusimos fue que mandasen una nota a los correctores informando de la irregularidad y dando indicaciones para que lo tuvieran en cuenta en la corrección y no se perjudicará a nadie. López Molina quedó en llevar esta propuesta (que él sí aceptó) al resto de los coordinadores e informarnos después del resultado. Finalmente han  decidido dejar las cosas como están, consideran que el ejercicio ha de corregirse igual que si fuera un texto de los obligatorios.

 Ante esta situación, pensamos que el Profesorado de Filosofía debe conocer lo sucedido y decidir después, con toda la información, si quiere o no manifestar su queja ante la coordinación, que no sigue las propias pautas.

Un saludo,


Esperanza Rodríguez Guillen
Presidenta de la  Plataforma de defensa de la Filosofia de Madrid
Manuel Sanlés Olivares
Vicepresidente de la SEPFi
Enrique P. Mesa  Garcia
Presidente de la Asociación de Profesores de Filosofía de Madrid

domingo, junio 07, 2015

MIS ALUMNOS ME CRITICAN (y van...)

Lo decíamos hace un año.

Hay una idea falsa con ribetes de modernidad: que la escuela debe ser democrática. Es un error grave  y profundamente reaccionario. Pero, no es ahora el momento de entrar en ello. La escuela, al menos la escuela pública, es un servicio al ciudadano y como tal debe ser evaluado por él. La idea de que las escuelas y los profesores no deben ser evaluados recurre también al pensamiento estamental en el cual solo la casta -aquí utilizado con precisión- podía autocomplacerse. Sin embargo, nosotros que creemos curiosamente que la escuela no debe ser democrática, sostenemos que los profesores deben ser evaluados y que una parte de dicha evaluación deben realizarla los propios alumnos.

Desde hace años, era el año 2005, iniciamos nuestra andadura con los blogs de los alumnos. La andadura sigue. Y un clásico en los artículos mandados ha sido, al final de curso, la crítica a la clase de ética o de filosofía. Y aquí están sus blogs y en ellos están sus críticas.  Ya saben que la democracia se construye también en las escuelas.

Este año lo reiteramos.