No caeré en la tontería calimochera de alegrarme de la cojida. Pero tampoco me apena.
Sigo sin comprender como alguien puede disfrutar viendo la tortura de un animal.
Tampoco me da la sesera para entender, como la legislación es capaz de penar el maltrato a los animales incluso en el matadero y no penaliza ni las corridas de toros, ni el sacrificio halal de musulmanes. Por contra, si se penaliza el sacrificio kosher de los judios, que se ven obligados, si quieren seguir sus ritos, a comprar la carne en carnecerías islamicas o comprarla importada.
En realidad era su única razón de existir: su muerte en la plaza. Lo que me preocupa es su pose levemente demagógica, don EPMesa. Muy relativista le he notado.
3 comentarios:
No caeré en la tontería calimochera de alegrarme de la cojida.
Pero tampoco me apena.
Sigo sin comprender como alguien puede disfrutar viendo la tortura de un animal.
Tampoco me da la sesera para entender, como la legislación es capaz de penar el maltrato a los animales incluso en el matadero y no penaliza ni las corridas de toros, ni el sacrificio halal de musulmanes.
Por contra, si se penaliza el sacrificio kosher de los judios, que se ven obligados, si quieren seguir sus ritos, a comprar la carne en carnecerías islamicas o comprarla importada.
En realidad era su única razón de existir: su muerte en la plaza. Lo que me preocupa es su pose levemente demagógica, don EPMesa. Muy relativista le he notado.
Es la hora de jubilar el toro
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