lunes, junio 21, 2010

VIDA INTERIOR/53 : UNA CURIOSIDAD (sobre dar las gracias)

¿Quién de nosotros no tiene una vida interior muy grande? ¿Y qué poeta no nos la cuenta una y otra vez? En esta sección mi alma se desnudará. Incluso he comprado una nueva para tenerla más grande. Porque, en el fondo, yo también quiero ser feliz.

Mientras escribo un artículo que sin duda revolucionará el mundo de la izquierda sobre el capitalismo y la estructura de clase, no puedo por menos que contar una pequeña anécdota.

Antes de nada: yo cobro por dar clase.
Antes de nada, cuando voy a un restaurante doy las gracias al camarero al servirme un plato. Y al taxista. Y al dependiente.

Hoy se me ha acercado un alumno y me ha dado las gracias por el curso. Otros lo han hecho antes, también.
Hace poco, un padre me dio las gracias. Otros lo habían hecho ya.
En distintos cursos. En diferentes años.

Es cierto sin duda, yo cobro por dar clase.

Nunca nadie de una junta directiva me ha dado las gracias.
Nunca nadie de la administración me ha dado las gracias.
Por supuesto, yo cobro por dar clases.

Gracias, también.

5 comentarios:

Eloy Garavís dijo...

¿Qué esperaba usted? ¿Le ha dado algún motivo a esas juntas directivas para que se lo agradezcan? ¿Nació ayer?

Paco dijo...

Pues gracias por escribir esto.

De nada por leerle.

Anónimo dijo...

es verdad, ya casi nadie da las gracias, se disculpa o se muestra considerado.
si lo haces incluso quedas como un panoli.
o tempora o mores...

Un Oyente de Federico dijo...

La máquina de tabaco tambien es muy educada. En muchos bares es la única voz que escuchas saludar y dar las gracias: “Su tabaco, gracias”
Será por eso por lo que Doña Trini las quiere quitar.

En casa somos buenrrollistas, de los que saludan al conductor del autobus, levantamos la mano agradeciendo que nos dejen pasar en un paso cebra, entramos en el banco diciendo “buenos días en voz alta”. Y a pesar de que nos miren mal y nos tachen de horteras, cuando entramos en el restaurante ya sea “Comidas Paco” o “El Bulli” soltamos un “que aproveche” general, en voz alta.

Y a los maestros, nuestro agradecimiento de por vida.

Zicmu dijo...

Me ha recordado usted a este hombre, señor Mesa:

http://www.youtube.com/watch?v=My2ym2_pAkA

En una universidad de EEUU. tienen la costumbre de dar una conferencia los profesores cada año en la q les dicen a sus alumnos lo que les dirian si esa fuera su ultima clase. Para el caso del ponente, esa sera su ultima clase. tenia cancer de pancreas.

PD: me disculpo por la ausencia de tildes, pero tengo un virus en el ordena algo perro...