domingo, septiembre 11, 2011

11S

A veces cuesta hacer palpable lo evidente. Cuando Al Qaeda atacó Estados Unidos el 11 de septiembre, no atacaba a este país solamente. Lo que Al Qaeda atacaba era a occidente. Y no le atacaba por malvado imperialista o algo así, al fin y al cabo el imperialismo se reparte en los dos hemisferios. Tampoco iba contra el capitalismo. Ni siquiera contra el neoliberalismo. Iba contra el estado laico. Es decir, lo que atacaba Al Qaeda era al espíritu de la Modernidad. Lo que atacaba Al Qaeda era una sociedad que, afortunadamente, había dado la espalda a Alá. Y Alá es dios en árabe para acercar su discursos, aunque no sus actos, a otros santones. Al Qaeda mataba infieles que se atrevían a ir, incluso, sin velo.

Por eso, no se entiende que gente que presuntamente defiende la sociedad laica, entendiendo por ella aquella no gobernada por creencias religiosas sino por intentos racionales, minimice la importancia de los atentados del terrorismo integrista musulmán e incluso trate mejor a esta religión barbárica que a la cristiana, hace tiempo ya al menos domesticada en el uso de la violencia. No se entienden alianzas de civilizaciones ni multiculturalismos cuando esas ideas barbáricas violan permanentemente los derechos humanos. Y no se entienden porque todos esos musulmanes son, antes que musulmanes, seres humanos que deberían tener los mismos derechos que los occidentales.

Pero precisamente contra esa idea universal de lo humano iba Al Qaeda. Y por ese motivo cada muerto del 11S estadounidense es un muerto nuestro. Al menos de quienes creemos que lo laico es una condición necesaria, tampoco la única, de la democracia.


10 comentarios:

Anónimo dijo...

No se confunda. Atáqueme, insúlteme, desprécieme, aprovéchese, explóteme, vilipéndieme,ahógueme... Y odiaré todo lo que representa y lo que lo rodea, derechos incluidos. No hablamos de derechos humanos, hablamos de rechazo a aquello que considerábamos superior y que nos ha excluido y cercenado toda posibilidad de ser como ello. No debemos evitar el análisis psicilógico.

Un saludo.
don Francisco.

Don Güapo dijo...

Fukuyama dijo con acierto de los atentados del 11S que eran la reacción del patio trasero.

La primacía en todos loa ámbitos, a finales del siglo pasado, de USA y su filosofía de vida, tras imponerse en la guerra fría, fue lo que atrajo esa reacción del patio trasero, de odio y rencor travestido de fanatismo religioso.

De ahí, que todos los que de alguna forma se sienten vencidos en su ideología por ese país y su forma de actuar, muestren desdén por aquellos terribles hechos.

Sin embargo, dos cosas sí pusieron de manifiesto los atentados que, en mi criterio, son, la primera, el fin de la hegemonía americana, debido al insoportable peso de la púrpura, acrecentado a raíz de los atentados y que está dejando paso a un futuro cambio de poder a nivel geopolítico, que no de sistema y, segunda, frente a la creencia común, una pérdida del radicalismo islamista entre la propia comunidad musulmana, precisamente por el insoportable halo de anti-modernidad, es decir, de atraso en todos los órdenes, económico el primero, que destilan los fanáticos de esa religión.

Por cierto, ese cambio geopolítico, de naturaleza económica, no militar, es la raíz de los problemas europeos.

Anónimo dijo...

Don EP, anda Ud. muy despistado, en este caso. Juzga al Islam, desde la optica del cristianismo.
El Islam debe juzgarlo desde la óptica de su religión, el marxismo. El Islam es un Sistema Social disfrazado de religión.
Y si bien el marxismo permite cierta adaptación a la modernidad, el Islam ya nació totalmente anquilosado.
Por lo que no son ellos los que se adaptarán al mundo, si no que será el mundo el que se adaptará a ellos.

Un Oyente de Federico

DIEGO dijo...

Siento haberme quedado descolocado. ¿O sea que estamos hablando de una guerra de religiones?, ya.
Y con la idea de convertir a los sarracenos el Imperio se va , y nos lleva, de excursión a: Irak, Afganistan, Libia, etc. y los muertos en todos esos sitios son "sus muertos" y los de las torres gemelas son "nuestros muertos". Y ¿los muertos chilenos del 11-S del 73, de quien son? ¿o no son de nadie y por eso ayer ni se hizo mención al tema?
Gracias por expresar su opinión, que,como ve, no comparto aunque la respeto sin entenderla.

Don Güapo dijo...

Como el tema tiene toda la pinta de ser apasionante, al hilo del comentario de OdF, un apunte.

Discrepo de los que creen inadaptable el islamismo a los parámetros democráticos. Cierto que no lo hará de un día para otro, que no lo hará nunca completamente y que encontrará grandes impedimentos, pero esa adaptación se hará según se amolden a los parámetros del capitalismo moderno.

La globalización económica y el desarrollo tecnológico ha borrado fronteras, también la de muchos países musulmanes. No existe una visión unívoca entre ellos, y el diferente desarrollo entre los situados en el área africana frente a los del área asiática impiden referirse en términos de uniformidad. Los ortodoxos sunies son aliados del mundo occidental, frente a los más moderados, en principio, chiies. Algunos de ellos han alcanzado cotas de desarrollo muy elevado y su desarrollo en todos los aspectos, visto in situ, asombra.

El 11S puede ser una fecha históricamente parecida a la de 1492 o a la de 1789.

USA en la cumbre de su poder militar, con la posesión de la tecnología y con el dolar, ha expandido su sistema por ser el mejor adaptado. Pero como todos los imperios, el peso de la púrpura no es sostenible y las deudas más la imposibilidad de competir con nuevos actores, provocan su declive.

Todavía no ha ocurrido y posiblemente tardará en ocurrir mientras mantenga la primacía monetaria, militar y tecnológica, pero quizá ocurra así.

Esa es la transcendencia real del 11S, fecha que marca la cumbre de un imperio y el inicio de su declive, y con él, el nuestro, y que llegará antes.

ElSrM dijo...

El Islam de cara violenta estaría en declive igual que lo estuvo en su día, hasta hoy, el Cristianismo que quemaba libros, escritores y lectores. Los asesinatos de masas del 11-S fueron repudiados por la gran mayoría de los simpatizantes de la religión musulmana en USA y Europa.

También es cierto que difícilmente podrán nunca hacer una transición completa hacia la Democracia, que incluye al Laicismo por su respeto a las conciencias ajenas, que incluye el rechazo a la violencia contra quienes piensan distinto, etc.

No pueden hacerlo sin dejar de ser ellas mismas. Estructuralmente estas religiones abrahámicas niegan que el Ser Humano sea sujeto activo en la construcción y disfrute de su propia vida, de la sociedad y de la civilización. Son siervos de Dios. Niegan también la libertad de pensamiento a quienes tienen ideologías distintas de la suya, quienes irían entrando en las categorías de infieles, incrédulos, descreídos, personas de moral laxa... e irían saliendo de las categorías de prójimo, hermanos, pueblo de Dios, rebaño, semejantes... con lo que eso puede acabar comportando.

Esto que digo será grosso modo y con excepciones siempre, estas cosas sociales no funcionan de manera absoluta, como todos sabemos.

La principal motivación de los asesinos de Al-Qaeda era el Laicismo, probablemente. Suele serlo por parte de muchas religiones. Pero no descartemos tampoco el propio Capitalismo, pues tal sistema político-económico también incluye multitud de cosas que estos religiosos pueden considerar pecaminosas. Fíjemonos en el principal objetivo militar escogido: el centro financiero de aquel país, nada menos.

La idea de alianza vs. choque de civilizaciones no tendría por qué ser mala si se persiguiera la mayor ilustración, la emancipación humana, etc. mediante esas alianzas o colaboraciones. Lo malo es que acaba siendo un eslogan más o menos hueco para dejarlo todo como está en ese aspecto y conseguir en el camino patente de corso para ser cómplices de las barbaries (como la ablación del clítoris p.ej.), para mirar para otro lado porque, capitalistamente por supuesto (p.ej. contratos de materias primas), convendría, sería más rentable o lucrativo.

Buen apunte, en la línea de la crítica exhaustiva e implacable empezando por los más cercanos, este de los falsos laicos (también los hay de verdad, claro que sí) que en realidad serían reaccionarios disfrazados.

(...)

ElSrM dijo...

(...)

Encontramos a esta clase de agentes en todas partes y es bueno enfrentarlos a la contradicción. No diría "para desenmascararlos", porque eso sería suponer de entrada que lo hacen dolosamente, sino simplemente para, tengan el motivo y la intención que tengan, que sea observada y afrontada dicha contradicción.

En un escrito suyo anterior comenté p.ej. que los "pro vida" en realidad no son tal cosa, sino simplemente anti abortistas (cosa legítima) que han decidido presentarse como algo más complejo y rico (aunque limitándose al anti abortismo en la práctica).

Encontraremos, y debemos siempre por ello criticarlo todo para empujar a su mejora, corrección o filtrado, a p.ej. anticlericales que dicen ser laicos, a sexistas que dicen ser anti sexistas, a amigos de las élites o de las vanguardias que dicen ser demócratas liberales o marxistas, a oligarcas que dicen ser revolucionarios emancipadores...

En el Reino de España, donde el Islam es moderado en su gran mayoría (pocos o ningún burka en la mayoría de lugares, p.ej.), y donde hemos disfrutado históricamente de la hegemonía del Cristianismo Catolicismo, el que las mayores críticas religiosas se dirijan hacia éste último podrían estar motivado por esa nuestra propia Historia.

Sin embargo, si alguien se toma un momento para criticar un abuso de poder, una imposición moral, un acto violento... proveniente de algún sector cristiano católico en España, debería, en justicia, tratar con el rigor merecido, que es mucho más, la condena a cosas tan abyectas como el 11-S.

Podríamos aprovechar para seguir con el hilo de la crítica implacable y poner a los U.S.A., a su Inteligencia Militar que no a sus ciudadanos, ante una contradicción: el 11-S habría sido imposible sin que ellos colaboraran, junto a Arabia Saudí, Pakistán y otros agentes, en la creación de Al-Qaeda, eficazmente entrenada para la guerra de guerrillas y el paramilitarismo, cuando decidieron derrocar aquel Gobierno democrático de Afganistán que tanto les había molestado, hace ya unas décadas. A unos (los integristas religiosos), porque era laico. A otros (los capitalistas imperialistas), porque les ofrecía peores condiciones de acceso mercantil a las materias primas de su territorio nacional.

Cordialmente,

Anónimo dijo...

Juzgando el Islam, sólo como una religión dificilmente o imposiblemente, se puede entender las convulsiones que desde los 70 acaecen en Oriente medio y que culminan en New York, Beslan, Madrid y Londres.

De igual modo que el Socialismo, el Islam sólo se puede imponer por la fuerza. Es holístico, no es solo ir a misa el domingo y santiguarse al salir de casa, es un SISTEMA SOCIAL. Y hasta que no se entienda esto, dificilmente se puede analizar estos sucesos.

El Corán son leyes (Sharía) de obligado cumplimiento que al estar dictadas directamente por Dios, están por encima de cualquier otra ley: Contitución, Declaración Derechos Humanos, Confederación Galáctica o la más más que se les pueda ocurrir a Uds.
Además incuestionables ¿Quien va a contradecir a Dios?, mejor dicho ¿quien se atreve a contradecir a Dios?
Esto no sucede con ninguna otra de las grandes religiones —budismo, judaismo, cristianismo, jainismo…—. Por eso, por más que se empeñen Uds. no se pueden comparar.
Ni siquiera alguna de esas sectas, como los “eimis” que tienen un modo de vida ajustado a la Biblia, es comparable, pues es sólo su interpretación, que modificarán cuando les parezca o interese

Si fueron a por USA el 11-S —día que se conmemora el primer asentamiento judio en Palestina— no es porque USA sea cristiana, laica o capitalista, si no porque es el lider de un sistema en el que las mujeres son iguales a los hombres y dueñas de su destino, y en el que los maricones andan libremente por la calle.

En esto los laicos, son los tontos útiles que como sucedió en Irán, Afganistan, Irak, Palestina, como está sucediendo en Egipto, en Tunez, Libia y a no mucho tardar en Turquía, serán desechados una vez logrados los objetivos.

El motor de estas convulsiones es la Yihad, que condena a muerte a los apostatas que conociendo a Dios no se someten a el —cristianos y judios— y exculpa a los laicos porque como todavía no han conocido a Dios, no lo han podido rechazar.
Su objeto es la islamización universal, proceso que siempre se ha hecho a sangre y fuego y esta vez no tiene que ser diferente ahora. Además pueden hacerlo pues disponen de recursos ilimitados de financiación.

Un Oyente de Federico

Enrique P. Mesa García dijo...

Perdonen que no les haya contestado, mañana lo intento.

Enrique P. Mesa García dijo...

Ya estoy aquí. A ver, yo creo que no es incompatible nda de lo dicho porque estamos mezclando a al Quaeda con el islam como religión.
Hay preguntas interesantes que se desprenden de los comentarios:
1.- ¿Es incompatible la religión musulmana con la democracia? Yo creo que sí, pero como lo era la cristiana.
2.- ¿La población musulmana poya a al Queda? No creo, por lo que señala muy bien D. Güapo además. Lo que quieren los musulmanes es vivir como nosotros y ahí, como dice D. Francisco, sí habría cierto resentimeinto hacia occidenete por no haberles dejado haber sido así. (POr cieto, en este apsecto es muy interesante la diferencia entre la administración Obama y Bush, mírese Libia).
3.- ¿Debe ser toda democracia laica? POr supuesto. Pero no todo inicio de democracia debe serlo,. Aquí se olvida con frecuencia, por ejemplo, la democracia cristiana (que no escandalizaba presumtamente a nadie aunque lo fuera). Es decir, en occidente la religión ha pesado mucho.
y yo creo que la pregunta fundamental: ¿queda algún papel para la religión en la vida humana? Y la hago así aposta porque creo que debe plantearse en plan existencial, valga la petulancia. O sea, ¿no estaremos también percibeindo el ocaso, ya no solo en occidente donde fue hace tiempo, sino en oriente de la religión como el gra elemento socializador?