Demóstenes tuvo sus Filípicas.
Cicerón, sus Catilinarias.
Jesús, su montaña.
Shakespeare muchos: ejemplos en Julio César y en Enrique V.
Y Lincoln, el mejor discurso de la historia...
Pero yo también he hablado en Villaverde.
En el pregón de las fiestas.
Y es el mejor lugar que yo hubiera podido escoger.
Aquí se lo dejo.
3 comentarios:
Maravilloso, Don Enrique.
Me he reido y me ha dado rabía no estar ahí aclamándole junto con la pandilla de alumnos-fans que se escucha de fondo todo el rato.
Había comentado con mi señora el ir a escuchar su pregón, estamos relativamente cerca. Sabía que haría muy buen uso de su ingenio y humor. Pero se nos pasó. Le agradezco que publique el video.
Un Oyente de Federico
Y cuando crees que el límite se ha alcanzado ves que aun queda mucho...
Se pone el listón cada vez más alto D. Enrique y lo supera siempre con creces...da gusto.
http://gph.is/2cDQNLe
Doña Loli Loligo, creo que ya urge crear el club de fans de Don Enrique, con camisetas, posters, chapas, etc... y un himno al “sapere aude”.
Antes de que se nos anticipen otros.
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