lunes, julio 14, 2008

NACIONALISMO, LENGUA Y DOMINACIÓN

El reciente Manifiesto en defensa de la lengua común, que se llama así, ha generado una polémica curiosa. La catalogamos de curiosa porque la autoproclamada izquierda ha corrida a la defensa del nacionalismo y ha tildado a los autores y firmantes del manifiesto, entre los que me encuentro, de neofranquistas, fascistas, nacionalistas españoles y otras lindezas por el estilo. Personalmente, y es por pereza no por dignidad, me da igual que lo opinen. Pero es curioso que la autoproclamada izquierda, y tan de izquierdas que ya prepara el aborto libre –eso sí es de izquierdas- y el voto inmigrante –uy, uy, uy, qué de izquierdas-, se haya enfadado tanto. Porque el manifiesto, que se queda corto en mi opinión, no era para tanto. Así que si realmente quieren saber lo que yo opino, y es no tener otra cosa que hacer sinceramente, lean lo siguiente.

Las lenguas son, entre otras cosas, instrumentos de comunicación. Las lenguas son, entre otras cosas, hermosos instrumentos de belleza. Pero las lenguas son, también, instrumentos de dominación y control social. Para ello, cuando la lengua es única y ya la habla tanto la élite social como el resto de la población se genera la idea de su correcta utilización y pronunciación, por ejemplo, en inglés, que diferencia a las clases sociales –lo que no quiere decir por supuesto que la lengua se pueda utilizar como uno quiera-. Cuando hay dos lenguas, sin embargo, el sistema ya no puede ser ese. Entonces se trata de que la lengua de aquellos que tienen el poder, o lo buscan, se imponga como lengua única y modelo de homogeneización social. Pero esto tiene sus matizaciones pues, como ya hemos señalado, es diferente si la élite ya posee el poder o lo busca. Y este tema de la búsqueda del poder es precisamente la clave de todo el problema lingüístico, generado por el nacionalismo, en España.

Comencemos. Las élites sociales tienden a buscar el poder. Para ello precisan dos cosas: en primer lugar, algo que las señale públicamente como élites, es decir, algo que las haga diferentes a la chusma; en segundo lugar, que ese algo, sin embargo, pueda ser tomado por esa misma chusma como sistema de identificación, como mito, y por tanto como legitimación de esa misma élite que ya lo posee y son, así, los adelantados que deben tener el poder. Los políticos profesionales catalanes y vascos, especialmente los nacionalistas pero ya también los de PSOE e IU y en ciertas zonas los del PP, tienen un límite natural a su ambición: el territorio regional - de esto ya hemos hablado aquí-. Y los políticos profesionales nacionalistas, y los del PSOE e IU y cada vez más los del PP, son una élite. Pero una élite con ese problema específico de limitación, como las especies endógenas de la naturaleza, a un territorio muy concreto. Así, cuando una élite limitada frente a un poder superior externo quiere tomar el poder en lo que considera su territorio, en realidad lo considera su cortijo, en primer lugar debe homogeneizarlo como propio y distinto frente a ese poder externo para presentar a este como extraño y a sí mismos como lo nacional. Y aquí hay dos opciones para conseguirlo: por un lado, el crimen o el exilio para todos aquellos que no piensan igual, algo que se ha hecho con cierto éxito en el País Vasco; por otro, conseguir un proceso de identificación utilizando un elemento reconvertido en ideológico, aunque no necesariamente tal por sí mismo, y que se transforma en hecho necesario para el medrado o ascenso social.

Eliminemos la primera opción, pues solo se usa en el País Vasco. Analicemos, por su extensión regional, la segunda. En esta segunda opción se trata de encontrar un elemento que cumpla una tarea, a su vez, doble: por un lado, se trata de buscar algo que la élite o bien posea ya o bien lo presente como desideratum para llegar a su propia posición -que ella, curiosamente, ya posee-;por otro, este algo debe además de ser un factor excluyente primero para una mayoría, pues si no, no existiría tal élite, y luego, una vez tomado el poder, pasar a ser un modelo de identificación al ir incluyendo paulatinamente a todos como miembros de una nueva comunidad o como excluidos de la misma. Este método, que ya utilizaron los nazis con brillantez a través del concepto de raza aria, será el utilizado por los nacionalistas, salvando las distancias por supuesto, pero a través de la autodenominada lengua propia o lengua nacional.

Efectivamente. La seña de identidad, como tales nacionalistas, será la lengua que se sitúa, incluso, por encima de la ideología política. No se trata aquí de que ellos la hablaran al principio o no, que en el País Vasco muchas veces era no, sino que la idea era que el idioma que se hablaba, ya realmente ya de forma imaginaria, en la región era el símbolo diferencial con el resto del país, presentado generalmente como atrasado y depredador, y que la élite se presentaba a sí misma como la poseedora de la esencia patria y su garante: la lengua. Efectivamente, a partir de ahí surge en las regiones con partidos nacionalistas fuertes e idioma singular una desenfrenada carrera con un doble objetivo: primero, dominar la sociedad a través de tomar toda la administración pública con sus fieles y generar, en el resto de la actividad económica, una relación de clientelismo; segundo, obtener un estado de opinión en el cual cualquier ataque al empleo de la lengua como elemento ideológico, en realidad elemento de dominación social, fuera un ataque contra la lengua misma , la cultura propia –como si la cultura tuviera lugar- y la idiosincrasia autóctona –que básicamente se reduce al modo de calarse la boina-. Así se comenzó un proceso que empezó con el asalto a la administración pública a través de la petición en las oposiciones, al principio como mérito luego como obligación, del conocimiento de la lengua regional. Y se hizo porque se sabía que iban a ser los elementos nacionalistas los más beneficiados con la medida y porque se eliminaba así la presencia de personas de fuera de la propia región: se homogeneizaba la sociedad eliminando al forastero y al diferente. Por si esto no fuera poco, y siempre contando con la simpatía o el silencio cómplice de la autoproclamada izquierda, los empresarios regionales veían con buenos ojos las medidas coercitivas en materia de etiquetado pues ello limitaba la propia competencia o al menos la paliaba. Así, la lengua no era ya un medio de comunicación sino de dominio social. El último paso, dado a través de la educación, ha sido extender la lengua propia a las capas sociales como elemento mítico de unión.

El resultado es altamente satisfactorio: el PNV lleva gobernando sin descanso en el País Vasco hasta ahora y el PSC ha perdido la S pero ha levantado la C -de catalán, que nadie piense cosas raras- para quitarle el poder a CiU mientras que IU se ha convertido en una especie de coros y danzas folclóricas de acuerdo a cada región –aunque, sin duda, muy de izquierdas-. El dominio triunfa.

Cuando yo era niño recuerdo que por navidades siempre ponían las películas de Tarzán -Tarzán solo hay uno: Johnny Weissmuller -. En ellas, y tras entretenidas aventuras que a veces se repetían pero siendo niño uno no se percataba de ello, surgía una terrible tribu salvaje, aparte de los gabonis, que buscaba matar a Jane –la guapísima Maureen O´Sullivan- y al safari. Y recuerdo que me daba miedo: era un tribu, eran salvajes. Tan alejados de la civilización. Pero siempre recordaré que quien más miedo me daba de todos los de la tribu era el hechicero con las plumas más largas y las tradiciones más ancestrales.

23 comentarios:

Anónimo dijo...

No m'estranya que l'autor d'aquesta entrada hagi signat el manifest en qüestió. Parla del que no sap –si no és des de termes estrictament teòrics, freds i provinents exclusivament d'un sol punt de vista–, perquè per a ell, a Espanya no existeix sinó un idioma a tenir en compte, i no acaba de capir que encara en sobrevisquin d'altres. (Aquest en el qual escric té, com a mínim, tanta vida com el castellà –que no espanyol, una mica de dignitat, si us plau, que la mateixa denominació de l'idioma ja parla d'una dominació prèvia a la que provoca la denúncia de l'autor–, i sobreviu gràcies a la voluntat dels seus usuaris perquè així sigui. Per bé que suport no –que n’hauria de tenir, però hom no pot esperar que en ragi d’on no n’hi ha–, almenys el respecte li és degut.)

Què ho deu fer, que tot i les maniobres maquiavèliques de Felip V, Primo de Rivera o Franco (com, per exemple, la repoblació del territori català amb una potent i forçada migració d'altres parts del territori espanyol, acompanyada de la prohibició de l'ús de la pròpia llengua), què ho fa, repeteixo, que aquest estimat idioma segueixi ben viu, tant com quan era prohibit, que jo el sentia a tota casa on anava amb els meus pares (dècada dels cinquantes), i després a la meva adolescència (dècada dels seixantes), notant amb estupor com al carrer s'hi havia de parlar amb la boca petita?

Dono la raó a l'autor quan explica aquestes coses a partir de les relacions de poder. Ara bé: és això plausible? És respectable? És assumible? És, en definitiva, argument a tenir en compte per a acceptar que això ha de seguir essent així? A aquestes altures del segle vint-i-un ja no m'és possible entendre, i encara menys assumir i respectar, que les raons de dominació siguin les que dictin quin haurà de ser l'esdevenidor d'una llengua ja existent com a eina de comunicació social en un territori concret, pertanyent o no (administrativament i políticament) a un determinat Estat.

El que porto escrit fins ara, és fruit de la lectura de la primera meitat de l’article de l’autor. Però quan he llegit la segona meitat, he fet una reflexió: l’autor es deu haver fet la composició dels fets segons una il•lustradíssima versió de Tele5, a tot estirar.

I si, en comptes d'engegar el seu discurs a partir de les relacions de poder –innegables, això és obvi–, l'enfoqués a l’empara de la demanda que fem molts més catalans que no es pensen a Espanya –ni molts polítics catalans d’allò més, que ells estan per la feina del poder, naturalment–: "Per què no ens deixen en pau?!"?

I una altra reflexió meva final, i cada cop més la de cada dia, és: “quina culpa en tic, jo, d’Espanya, d’aquesta Espanya que és com és, i que, a sobre, vol que sigui com Ella vol?!”

Anónimo dijo...

Se pasa usted varios pueblos, si me permite la expresión. Pero lo hace tan bien -tan bello el detalle personal al final del texto- que casi se le perdonan ciertos olvidos.

Franquismo, constitución, estatutos, cooficialidad y productos derivados... por poner sólo algunos ejemplos. Y los nazis, oiga, muy bien. Lengua (adquirible) y raza (parece ser que no). Y ya de paso un poco de antisemitismo fuera de Alemania y otro poco de Gran Guerra y crisis económica años 30. Y cuándo una diferencia pasa de ser boinuda a objetiva. Y elites nacionalistas y propietarios de medios de comunicación (madriz, madriz, madriz...) con sus respectivas audiencias y lenguas vehiculares a cuestas. y tantas cosas, oiga. Incluso el italiano.

No albergo dudas acerca de su inteligencia. Incluso de su gran inteligencia. Pero cuando las cosas salen tan redondas tanto usted -filósofo- como yo -mero diletante- deberíamos empezar a sospechar que alguna cosilla huele a podrido en nuestra Dinamarca.

Enrique P. Mesa García dijo...

Como hasta ahora no había surgido este prolema no había señalado nada en relación al mismo. Pero se ruega, por una cuestión de cortesía, que los comentarios en este blog se realicen en español, se podría llegar a admitir el castellano, pues uno no anda fuerte de otras lenguas ni tan siquiera en la intimidad.
Por respeto a D. Catalino su entrada se mantendrá, pues se ha realizado antes de este aviso, pero desde ahora cualquier entrada en idoma diferente al español se eliminará porque, sencillamente, no seré capaz de saber qué quiere decir.

Anónimo dijo...

Se me olvidó señalar que sí, que la cultura tiene lugar, vaya que sí. De hecho estoy convencido de que usted sabe que así es, ya que el lugar es uno de los elementos que determinan algunas de las características de la cultura.

Por cierto, lamento no ser capaz de entender del todo el texto de catalino ya que me parece que contiene algunas reflexiones interesantes que insuflan vida al debate.

Un saludo.

Anónimo dijo...

Le felicito por su artículo Sr. EP. Sin embargo, y para desilusión o incredulidad de muchos, no soy franquista, ni tan siquiera de derechas. No me siento español, sino un humilde ciudadano de una sociedad que quisiera democrática, justa y abierta.
Es evidente que los partidos de izquierda buscan una veta de votos en el nacionalismo, aún a costa de su inmolación ideológica. Y para ello no encuntran dificultad en ponerse una venda en los ojos. Se escandalizan cada vez que alguien señala con lucidez el isomorfismo nacionalismo - totalitarismo, como si de un exceso se tratara. Pero lo cierto es que se analiza cuidadosamente los medios de presión que el nacionalismo emplea para la consecución de sus fines, cualquier mente libre de maniqueísmo habría de rendirse a la evidencia.
¿Qué ocurrirá cuando los jóvenes de varias regiones no sepan ni leer ni escribir en el idioma común? Todo lo que esté más allá de su aldea gala le sera extraño. Será entonces cuando el Estado cautivo y desarmando, contemple como los clanes tribales alcanzan sus últimos objetivos. Los balcanes den siglo XXI.
Por cierto D. Catalino, comentar un blog en otro idioma al que éste se encuentra escrito será muy coherente con su sentir, pero no deja de ser un muestra deliberada de grosería.

Anónimo dijo...

Permítame un comentario.

Aunque lo que manifiesta es plenamente cierto y sabido por todos, salvo los ignorantes, la realidad de la lengua parece que se rebela contra las intenciones de los políticos. Así, la inmigración latinoamericana, la televisión y las necesidades comerciales, hacen de apagafuegos. El corto recorrido poblacional de las sociedades regidas por nacionalistas, hacen el resto.

Digo esto porque intuyo que Ud no intuye la intencionalidad política del manifiesto, que la tiene (muy lista Rosa), y que no es otra que la de obtener réditos políticos de un Psoe que no puede más que escorarse hacia el nacionalismo en este tema, no por convicción como dice Ud, sino por un motivo de calado: cobrarse ese apoyo al PSC y al catalanismo político en la negociación de la financiación autonómica, verdadera base del poder socialista en España.

Es todo un poco menos teórico de lo que cuenta. Mientras, desde el PSOE azuzan campañas a modo de tinta de calamar (contra el PP fundamentalmente). No obstante, el PP se ha puesto de perfil. Solo desde IU, pican el anzuelo.

PD: Aunque esta es su casa, y yo no soy quién, lo de censurar comentarios que se puedan traducir, incluso se entienden sin traducir, es feote.

Un Oyente de Federico dijo...

“¡AMIGOS¡
Tal y como os prometimos os estamos haciendo llegar, con nuestra revista los mejores discos del momento, en este, que ahora tenéis en vuestras manos os ofrecemos el disco de un gran cantante, discutido y a veces incomprendido, un gran puntal de “La Nova Canco Catalana” Raimond.…”

Esto viene impreso en el single de vinilo, que tengo aquí a mi lado. Editado por EDIGSA (Depósito Legal: B.15788-1963) y contiene dos canciones en catalán cantadas por RAIMON: “CANCO D' AMOR NUM. 3 (Si un dia vols)” y “AHIR (Diguem no)”, esta última de Gabriel Celaya”.
Este disco acompañaba a la revista musical juvenil, de tirada nacional, FONORAMA en ¡¡¡¡1963!!!!
Esto nádie puede negármelo.

Asi que los que dicen que Franco prohibía hablar el catalan MIENTEN.

Esto otro que le adjunto (quite Ud lo que quiera, pues entiendo que es un exceso), no he comprobado su veracidad, ni voy a hacerlo porque tiene todos los visos de ser datos ciertos. Esto no hace a Franco mejor ni peor.
Pero cuestiona la victimización de los nacional-socialistas catalanes, en la que argumentan su “derecho moral” a perseguir y represaliar a los castellano parlantes.

1942. Aparece el libro "Rosa mística" de Mossén Camil Geis, editado en Sabadell e impreso por Joan Sallent en catalán.
1944. El recientemente fallecido Josep Vergés (6 julio 2001) que había fundado "Destino" en 1939 junto con Ignacio Agustí y el poeta Joan Teixidor, establece el 6 de enero de 1944 el premio "Eugenio Nadal" que daba a conocer a la joven Carmen Laforet y a su novela "Nada". El galardón descubrió a narradores tan importantes como Miguel Delibes, Ana María Matute, Rafael Sánchez Ferlosio o Carmen Martín Gaite.
1945.Con apoyo y subvención del Gobierno se celebra el centenario del gran poeta en catalán Mossén Cinto Verdaguer.
1947 . Se otorga el premio "Joan Martorell" para novela en catalán. Son premiados Celia Suñol por su novela "Primera Part" y "El cel no és transparent", de María Aurelia de Campmany.
1947 . Se crea el premio "Ciudad de Barcelona".
1949 . Para narraciones cortas se crea en la Casa del Libro el premio "Víctor Català", así como los premios "Aedos" para biografías, "Josep Ysart" para ensayos y el "Ossa Menor" que ideó el gallego-catalán José Pedreira, cambiándose luego el nombre por el de "Carles Riba" a la muerte de éste, en su honor.
1951 . Se otorga un premio a la poesía en catalán con la misma cuantía económica que a la poesía en castellano. Posteriormente el premio se amplia a otras actividades culturales como "Teatro" y "Bellas Artes".
1951. José Mª Cruzet funda Ediciones "Selecta" para obras escritas en catalán. En colaboración con Aymà concede el "Joanot Martorell" al insigne veterano de la pluma Josep Plà por su creación "El carrer estret", una de las más bellas narraciones en catalán de nuestro tiempo.
1952. En la visita del Generalísimo Franco a Cataluña, en el mes de junio, se inaugura la cátedra "Milà i Fontanals" para el estudio científico de la lengua catalana.
1955. El poeta y escritor José Mª de Sagarra recibe la orden de Alfonso X el Sabio con ocasión de la publicación de su obra en catalán titulada "Memories".
1956. Nace "Lletra d´Or", sin recompensa económica, y tiene como galardón una "F" de oro, distinguiéndose con él al mejor libro del año anterior escrito en catalán. El primero en recibir este galardón fue Salvador Espriu por "Final de Laberint".
1959. Los premios barceloneses "Crítica" se incorporan a la producción en catalán.
1960. El Centro de Lecturas de Valls inicia un curso de lengua y literatura catalanas de carácter público.
1960. En Barcelona se crea el premio "Sant Jordi" para novela, dotado con 150.000 pesetas, cantidad análoga, intencionadamente, a la del "Nadal".
1960. Con subvención del Gobierno se celebra el centenario del gran poeta catalán Joan Maragall.
1965. El gran poeta y canónigo de la catedral tarraconense don Miguel Melendres edita su obra "L´esposa de l´anyell", un poema en catalán de doce mil versos. Encuadernado en rica piel blanca, lo lleva el Arzobispo de Tarragona, doctor Arriba y Castro, al Papa Pablo VI, que recibe complacido esta singular muestra de la hermosa lengua catalana que le llega de España.
1965. El Ateneo Barcelonés monta un curso de Filología Catalana.
1965. A los Premios Nacionales de Literatura, se le añade el "Verdaguer" para producción en catalán.
1966. Barcelona rinde homenaje a su ilustre hijo Maragall, en el que intervienen Gregorio Marañón, Pere Roig, José Mª Pemán y Ruiz Giménez. En los jardines que llevan el nombre del poeta, en Montjuic, se le eleva un busto.
1966. Radio Tarragona organiza a través de sus antenas unos cursos de catalán con profesores especializados.
1967. La Diputación de Lérida dota una cátedra de "Lengua catalana".
1967. La Diputación de Barcelona acuerda dar cursos de catalán en todos los centros culturales dependientes de la corporación y acuerda fundar la cátedra de Lengua Catalana en la Facultad de Teología de Sant Cugat (Barcelona).
1968. Editorial Destino completa el "Nadal" con el nuevo "Josep Plà", concedido a "Onades sobre una roca deserta" de Terenci Moix. En la selecta lista de los que lograron este galardón figuran lo más florido de la narrativa catalana: Baltasar Porcel, Teresa Pàmies, Cirici Pellicer, Marià Manén, Enric Jardí, Llorenç Villalonga, Jaume Miravilles y Jordi Sarsaneda
1968. En Gerona se otorga por primera vez el "Prudenci Bertrana"
1969. Nace el "Premi d´Honor a les Lletres Catalanes" con destino a la consagración de escritores noveles.
Para cerrar, una cita: "La literatura catalana vivió su mejor momento durante el franquismo, y la nueva hornada debería tomar ejemplo de aquella generación. /.../ Y la eufemística llamada normalización del catalán no ha producido ninguna obra literaria notable. /.../Son ellos los que están persiguiendo a sangre y fuego al español, tratando de conseguir su exterminio en Cataluña". Giuseppe Grilli, profesor de italiano en la Universidad de Barcelona.

Bode dijo...

El tema de necesitar una lengua para opositar es algo tan básico como que para trabajar eficientemente (ya sea de cara al público o con cualquier tipo de información) necesitas conocer la lengua del lugar en el que te encuentras. Punto.

En ningún momento he considerado una maniobra nacionalista el hecho que para trabajar donde trabajo (en Inglaterra) necesite conocer el idioma local (el inglés), sino sentido común, el cual parece ser que a usted le falta.

A mi me encanta hablar en castellano, de la misma forma que me encanta hablar en catalán, practicándolos simpre que puedo y quiero, deseo y espero que en Catalunya se establezca (con el tiempo) un bilingüismo total, es decir que toda la gente que vive en Catalunya de manera permanente (nunca le pediré a alguien que tiene pensado estar en Catalunya unos pocos mese que aprenda catalán) se sepa expresar y use indistintamente ambas lenguas, cosa que por si usted no lo sabe, le diré que ahora mismo no sucede ya que el castellano (sí, ese idioma tan amenazado) tiene una clara superioridad sobre el catalán.

Los casos del vasco y gallego no los conozco, pues no he tenido la suerte de visitar toda España, pero creo que no me equivoco si afirmo que en ambos casos los idiomas autóctono-regionales están en inferioridad.

Visite y conozca de lo que habla antes de hacer el ridículo.

Anónimo dijo...

"desde ahora cualquier entrada en idoma diferente al español se eliminará porque, sencillamente, no seré capaz de saber qué quiere decir."

Ciertamente es un resumen bastante bueno del problema que tenemos en nuestro país (¡¡ESPAÑA!!!) y al que trata de responder, a la manera tradicional (una, grande y libre), ese manifiesto que usted, por el bien del español y de España, ha tenido el valor y la entereza moral de firmar y difundir entre los paganos que, como yo mismo, pululamos por este extraño mundo que es "internec".

Como le digo, encuentro que la cita de usted con la que abro el comentario es tal vez mucho mejor resumen del "problema" que su florida pero infumable disertación al respecto... (dicho sea con todos mis respetos hacia su persona)

Me asombra como usted, a su edad, confesando ser profesor (y de filosofía!) reconozca que es incapaz de comprender, al menos en lo más esencial, unos párrafos escritos en una lengua de raíz latina que se habla en su propio país.

En fin, que usted como profesor ya sabrá que la ignorancia más difícil de erradicar es la que es consciente y elegida, poco puedo decirle, si acaso pues que así nos va y que a este paso muchos manifiestos le quedan a usted por firmar me parece, por lo que espero que el Altísimo le conserve a usted la salud y la fe para tan noble y quijotesca tarea.

Buena suerte / Bona Sort

Enrique P. Mesa García dijo...

Reconozco, D. Matias, que no sé catalán ni ninguna otra lengua romance fuera del español. Y ello a pesar de mi edad y de ser, ahora va, profesor de filosofía (pero en secundaria, que si fuera de la universidad...).
Pero el problema radica en que entender un texto en lo esencial puede ser útil para buscar una dirección o comer. Sn embargo, en una conversación intelectual sobre opiniones es de cortesía preocuparse de entenderlo todo, incluso o sobre todo lo accidental, y si está escrito en una lengua que uno no domina esto resulta difícil. Sé que no hablo catalán en la intimidad, ni francés ni rumano, así que creo que tengo el derecho a que en mi blog se escriba en español salvo en aquellos casos concretos en que este idioma no se conozca y sin embrago se quiere opinar sobre el artículo.

Como soy, en el fondo, una persona liberal, propongo para estos casos en los cuales el interlocutor sin saber español quiera opinar sobre mi artículo que ha leído en español, que me envíe su comentario por correo electrónico y yo lo traduciré, tal vez en lo esencial e incluso en lo accidental, al español en el cual estaba mi artículo original que él leyó aunque no pudiera entenderlo. Quizás me lleve tiempo, pero todo sea por la España plural y, no se nos olvide, el bienestar de los humildes.

Un Oyente de Federico dijo...

Hablan de cultura pero es política. Ud. lo aclara perfectamente en su comentario.
Pero ha olvidado Ud. mencionar la primera parte de este proceso y a mi entender la más importante para el proceso de dominación y control, La homogeinización o normalización.

Sabino Arana copió este proceso del realizado por los sionistas con la lengua hebrea, que tenía por objeto crear una lengua común a partir de las diferentes utilizaciones del Hebreo bíblico con el fin de ser un aglutinante en la creacion del Estado de Israel.
Sabino, realiza el mismo proceso, aunque este conlleve la dasaparición de hablas locales ancestrales del vascuence, con notables diferencias entre sí.
A Sabino Arana no le importa la desaparición de la cultura, pues el nuevo vascuence (batua), a la frontera genética le añadía la frontera linguística.
Y como no podía ser de otra manera utiliza una swastica como simbolo de su inventada nación.

En galicia, en ese proceso, la cosa llegó al ridículo. Había luxistas que pretendían homologar el portugues. Dandose la situación en las escuelas, que el aprobado de asignaturas en gallego dependía de si el maestro era luxista o no.

Los nacionalsocialistas catalanes en su afán de construcción del “Pequeño imperio catalán” (Rosa regas, dixit), aglutinando en base a su dialecto occitano, pretenden hacer desaparecer el valenciano o el mallorquin. Arrancando de raiz y curandose en salud de futuras reivindicaciones nacionalista dentro de su imperio.
Fue ridículo, marrullero y significativo de hasta donde son capaces de llegar los nacionalsocialistas catalanes, el caso del PDF con la Constitución Europea traducida al valenciano.

En las regiones españolas, no hay justificación histórica más allá de las tribales, para denominarlas “nación”. Y mucho menos “estado”.

Anónimo dijo...

A catalino: no nos dejan en paz porqué no pueden ni deben. No nos pueden dejar en paz porqué son nuestros vecinos, nuestros compatriotas y se preocupan por lo que pasa en este chiringuito llamado España, como un servidor también se preocupa. No deben hacerlo porqué es necesaria la crítica y la reflexión sobre lo que pasa en nuestro territorio.

A bodera, las lenguas no son personas por tanto las lenguas regionales "no están en inferioridad". Su argumento es ridículo.

Al oyente de Federico. Cariñosamente usted sigue confundiendo conceptos.
Normalización lingüística: este concepto ha sido usado en Cataluña y simplemente significa que la lengua catalana debe "normalizar" su uso. Es decir, debe sustituir al español en aquellos ámbitos de uso exclusivos del mismo. Un ejemplo de "normalización" sería conseguir que el catalán fuera la lengua de la administración de la justicia. Si consiguiéramos que el catalán se usara en ese ámbito habríamos conseguido una victoria pues se habría superado una situación "anómala" que la justicia catalana usase como lengua propia una lengua extranjera: el español.

Usted, señor oyente, confunde "normalización" con el proceso de normativización es decir el proceso de pasar de una habla a una lengua escrita, es decir crear todas las normas que permiten pasar a escribir un idioma. Es decir, a la hora de escribir los hablantes deben ponerse de acuerdo para escribir las palabras según unas mismas reglas.

Resumiendo: su defensa del mallorquín o de las hablas vascuences me parece ridícula, la boina debe dejar paso a la llegada de la "Razón". No así su crítica final:

"En las regiones españolas, no hay justificación histórica más allá de las tribales, para denominarlas “nación”. Y mucho menos “estado”."

Anónimo dijo...

El euskera batúa o unificado no tiene nada que ver con Sabino Arana. Wikipedia o Complutense.

Saludos.

Un Oyente de Federico dijo...

Don Pocholo, le agradezco su corrección. De seguro que confundo conceptos.
Pero a mi entender, por como veo que se utiliza normalmente, que “normalización” no es una acción aislada, sino un proceso que tiene ya implícita la normativización, entre otras acciones.

Actualmente algunos asturianos están pidiendo la “normalización” del “Bable” o el “Asturiano-Leones” (hace tiempo que me perdí en estos trajines y no se en que esta el asunto). No les he escuchado pedir la “normativización”

Entiendo que sería imposible una normalización sin su “normativización”.
Y sería absurda una “normativización” si no va formar parte de un proceso de “normalización”.

Me gustaría expresarme mejor, de manera más correcta, pero lo que lee Ud. es lo mejor que puedo hacerlo.

Cuando alguien le dice a un ibizenco que ya no puede decir “Ses Illes Balears”, como decía su madre, sino “Les Illes Balears” como dice la madre de otro que vive en otra parte; debería de explicarle también la finalidad de ese sacrificio.
Gesto tan ridículo, tiene una razón y no precisamente que el payes se quite la boina, como Ud. afirma. Tiene una razón y no es otra que una “razón de estado”, de un estado inventado.

Anónimo dijo...

Haciendo uso de una cortesía que no me falta, correspondiendo a la que me muestra el autor de la entrada publicando mi comentario a pesar de lo incómodo que le pudiera resultar, y sobre todo por respeto al 'salmantino' (y a otros que pudiera haber con dificultades de comprensión del catalán escrito), que expresa su interés por el contenido detallado del mismo, con permiso del autor lo vuelvo a exponer, traducido al castellano ("al cristiano", como se decía no ha demasiado por estos pagos), y todos tan contentos. ¿Vale?

=No me extraña que el autor de esta entrada haya firmado el manifiesto en cuestión. Habla de lo que no sabe –si no es en términos estrictamente teóricos, fríos y provenientes exclusivamente de un solo punto de vista–, porque para él, en España no existe más que un idioma a tener en cuenta, y no acaba de asimilar que aún sobrevivan otros. (Aquél en el cual escribí el original de este comentario tiene, como mínimo, tanta edad como el castellano –que no español, un poco de dignidad, por favor, que la misma denominación del idioma ya habla de una dominación previa a la que provoca la denuncia del autor–, y sobrevive gracias a la voluntad de sus usuarios de que así sea. Si bien, apoyo, no –que lo debería tener, pero no se puede esperar que ‘mane de donde no hay’–, por lo menos el respeto se le debe.)

¿Por qué será que, a pesar de las maniobras maquiavélicas de Felipe V, Primo de Rivera o Franco (como, por ejemplo, la repoblación del territorio catalán a base de una potente y forzada migración desde otras partes del territorio español, acompañada de la prohibición de usar la propia lengua), por qué será, repito, que este idioma tan querido sigue bien vivo, tanto como cuando estaba prohibido, que yo lo oía hablar en toda casa a la que iba con mis padres (década de los cincuenta), y después, en mi adolescencia (década de los sesenta), notando con estupor cómo en la calle sólo se podía utilizar por lo bajo?

Le doy la razón al autor cuando explica todas estas cosas a partir de las relaciones de poder. Ahora bien: ¿es eso plausible? ¿Es respetable? ¿Se puede y se debe asumir? ¿Es, en definitiva, el argumento a considerar para aceptar que ha de seguir siendo así? A estas alturas del siglo XXI ya no me es posible entender, y mucho menos asumir y respetar, que las razones de dominación sean las que dicten cuál habrá de ser el futuro de una lengua ya existente como instrumento de comunicación social en un territorio concreto, perteneciente o no (administrativa y políticamente) a un determinado Estado.

Lo que llevo escrito hasta ahora es fruto de la lectura de la primera mitad del artículo del autor. Pero cuando he leído la segunda mitad, he llegado a la siguiente conclusión: el autor debe haberse hecho su composición de los hechos según alguna ilustradísima versión de Tele5, a lo sumo.

¿Y si en vez de generar su discurso a partir de las relaciones de poder –innegables, esto es obvio–, lo enfocase a la luz de la demanda que nos hacemos muchos más catalanes de los que se piensan en España –y muchos políticos ‘de lo más catalanes’, que ellos están por la labor del poder, naturalmente–: “¡¿Por qué no nos dejan en paz?!”?

Una reflexión final, cada día más persistente: “¡¿Qué culpa tengo yo de España, de esa España que es como es, y que, encima, quiere que sea como Ella quiere?!”=

Sólo, que yo pensaba que podría no haber sido necesaria la traducción, habida cuenta de que el catalán, el vasco y el gallego parecen ser, en la actualidad, 'riqueza cultural' de España y 'patrimonio de los españoles' (ya no había más remedio, ¿verdad?).
Pero como veo que en España se dan cada vez más palos de ciego en lo referente a casar la realidad plural con la pretensión trasnochada de la España aglutinadora más allá del ámbito administrativo...
Como también veo que, a veces, en este mismo blog sin ir más lejos, se emiten opiniones tan alucinantes como: "...aglutinando en base a su dialecto occitano, pretenden hacer desaparecer el valenciano o el mallorquin." (Para empezar, el occitano y el catalán llevaron vidas paralelas, o sea que, de dialecto, ná de ná, ni el segundo del primero, ni el primero del segundo. Y para acabar, desde el Principat no se busca acabar ni con el mallorquín ni con el valenciano, ¡sólo faltaría! ¡Esa sí es nuestra riqueza! Sólo se pretende el reconocimiento de la realidad filológica, que nos indica que el valenciano y el mallorquín tienen exactamente la misma fuente: el catalán.) O: "...hasta donde son capaces de llegar los nacionalsocialistas catalanes, el caso del PDF con la Constitución Europea traducida al valenciano." No llego a comprender qué quiere decir el oyente de Federico: ¡si fueron los valencianos los que exigieron la traducción al valenciano! No debo haber sabido interpretar el comentario. Lo siento.
O esto otro: "...para denominarlas “nación”. Y mucho menos “estado”." En Catalunya sabemos que no somos un Estado. Nadie, absolutamente nadie, dice que Catalunya sea un Estado. (Puede que tampoco haya sabido interpretar esta alucinación. De nuevo lo siento.)

En fin, por todo ello, y como tener que batallar con alucinaciones resulta cansino, abandono este foro.

Anónimo dijo...

¡Ah, perdón! Me olvidaba...
'Pocholo' me dice: "...porque son nuestros vecinos, nuestros compatriotas..."
Ya.
¿En qué comulgamos un cacereño y yo? ¿Qué intereses comunes tenemos un burgalés y yo? Desde luego, España no.

El bueno de Stanley Kubrick incluyó una sabia reflexión en su película 'Senderos de gloria': "La patria es el último reducto de los cobardes."

Anónimo dijo...

¿En qué comulgamos un cacereño y yo? ¿Qué intereses comunes tenemos un burgalés y yo? Desde luego, España no.

Pues se equivoca, Catalino.

Los intereses de todo tipo (económicos, comerciales, culturales, históricos, familiares, legales, internacionacionales, deportivos y paro porque me canso) hacen imposible cualquier independencia.

Puede insistir, que es gratis. De hecho, esa insistencia le viene muy bien a otras comunidades, como Valencia (territorio a conquistar, supongo), Aragón (igual) o Madrid.

También puede pensar que son Uds muy mediterráneos, muy avanzados, que tienen mucho diseño y que España es una meseta llena de intolerantes castellanos dispuestos a la conquista y vagos meridionales vestidos de faralaes, con capital en Madrid, que es una ciudad donde sólo se comen bocadillos de calamares.

Es gratis.

Y por cierto, lo más importante, comulgan en la misma religión.

PD: Si me indica en que empresa trabaja (solo nombre) le cuantifico, incluso en pesetas, el interés exacto que le supone ser español de España.

Un Oyente de Federico dijo...

TRADUCCIÓN AL VALENCIANO DE LA CONSTITUCIÓN EUROPEA

Al poco de iniciarse el reinado de Zapatero, quiso este llevar a Bruselas el texto de La Constitución Europea taducido a las lenguas cooficiales: Catalán, Gallego, Valenciano y Vasco.
La Academia de la Lengua Valenciana, se ocupó de la traducción al valenciano.
Carod, se oponía a que se presentara la versión valenciana, alegaba que el valenciano no es un idioma.
La Generalitat catalana, con el pretexto de tener una referencia para su traducción, pidió a la Generalitat valenciana que le enviara la suya. Se habló entonces de que fue un PDF el archivo enviado.
La jugada fue que La Generalitat catalana, no hizo su traducción, imprimió y encuadernó la valenciana, tal cual, sin poner ni quitar ni una coma o ni una errata.
Y se negarón a que Zapatero la presentara como valenciana. Este así lo hizo.

Por lo que en Bruselas tienen la Constitución Europea traducido al valenciano, pero allí consta como traducida al catalán.
Con esta marrullería del nacionalsocialismo catalan, se consiguió que la Comunidad Europea no tenga constancia de la lengua cooficial española.

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Sr. Salmantino, como Ud. dice (contrariamente a lo que dije yo) Sabino Arana nada tiene que ver con el “batúa”. Es posterior.
De la Cierva en su libro “Hijos del agobio y la mentira” dice que su mayor impulsor fue el filólogo Federico Krutwing.
Sabino Arana no daba importancia a la lengua. Para el lo más importante era la pureza de raza.

Anónimo dijo...

Como antiguo alumno del Dr. Enrique Mesa en el IES Duque de Rivas, lo primero que me gustaría hacer es felicitarle por su trabajo, pasado y presente.

Lo segundo, como quasi-ingeniero que soy (no de esos a los que se les caen los puentes, sino de los que uno se acuerda cuando se corta internet o no se recibe la señal de tv o radio) me gustaría dar un nuevo enfoque al tema de las lenguas desde un punto de vista probabilístico (las conexiones se caen porque se usa teoría probabilística no matemática).

En una sociedad que tiende hacia la comunicación total (Internet) y lo homogéneo, me parece una locura intentar poner una valla electrificada al campo. Busquemos a la persona que descrubrirá la solución al sida. ¿Cúal es la probabilidad de que hable húngaro? Muy baja. ¿Cúal es la probabilidad de que hable catalán? Muy baja. ¿Y español (a nivel internacional no se denomina castellano sino español)? Baja. ¿Y de que hable inglés y/o alemán y/o francés y/o español y/o ruso...?Altísima

Si para ser doctor o investigador en una región del campo electrocutas tu valla, el doctor o investigador se irá a otra parte. Lamentablemente a día de hoy faltan doctores y sobran políticos.

odradek dijo...

don oyente, lo suyo no es la ling"'istica ni cosa parecida, mejor ded'iquese a leer esos libelos para jubilados que escriben los exterroristas neonazis y sus empladores.

de chomsky no ha le'ido ni las tapas de un solo libro y para colmo no sabe que el valenciano y el mallorqu'in, con el art'iculo salat del que habla, no constituyen lenguas sino dialectos, concretamente del catal'an, que a su vez viene siendo una variante del provenzal y 'este del lat'in, lengua imperial donde las hubiere de la que nuestras consolidadas lenguas son a su vez dialectos.

es una l'astima que a veces tengan raz'on los catalufos nacionalsocialistas y no los castellanos neonazis como usted pero en eso la tienen. qu'e se le va a hacer. lea algo m'as aparte de esas porquer'ias que suele citar.

Un Oyente de Federico dijo...

Don Odradek, no insista Ud.
Lo nuestro es imposible. Ya estoy felizmente casado.
Pero le llevo en mi corazón.

Y no se crea todo lo que dicen en los fanzines del RASH.

Sólo con que libere una neurona, (las otras las puede dejar que sigan viendo su video pornocasero de Pedro J.) es suficiente para darse cuenta de que todo lo que se hablaba en la Península Iberica a la llegada de Jaime I (criado en Occitania y hablaba el dialecto occitano) o era un romance dialecto del Latín o era arabe o la mezcla de ambos, salvo el vascuence que era/es un idioma independiente.
Existía el Reino de Valencia y existía el reino de Mallorca y no existía ni Cataluña, ni Carod, estaba en la llamada Marca Hispánica.

Y es de cajón que algo hablarían en los reinos de Valencia y Mallorca.
Puede que en algún fanzin del RASH diga que los valencianos y mallorquines permanecieron mudos hasta que los catalanes les enseñaron a hablar.
Según dicen las crónicas (escritas en Lemosí) entre las tropas con que Jaime I conquistó el Reino de Valencia solo había un 2% de habitantes de la marca hispánica (Cataluña).
Por muy fenómenos que sean sus catalanes un 2% no es suficiente para imponer una lengua.
En Mallorca después de conquistarla, se fueron zumbando por una epidemia de peste. Y se llevaron su dialecto.

De Cataluña se tiene constancia en el siglo XV (cataluinya) y vagamente parece que en boca de trobadores aparece a finales del XIII.

“Cataluña” figura como palabra de origen desconocido. Quieren colocar que viene de “castillo” pero en ninguna parte castillo ha perdido su raiz “cast”.
A mi personalmente, me gusta más la teoría que dice que Catalunya viene de “cátaros-anyunyats” (cátaros alejados), referidos a los cátaros que huyendo de la inquisición se ubicaron en España trayéndose su dialecto occitano.
Catalunya expresaría una situación y no un territorio. Que además al definir a refugiados no se publicita, por lo que no hay constancia hasta siglos después.

¿A Ud. que le parece? A mi me encanta, es muy “codigodavinchi”. me encantaría ser un descendiente de unos cataros-anyunyats.
Ademas, al ser los cátaros, perseguidos por el Vaticano, esta teoria la puden sacar en su Fanzín del RASH.
Y hasta se lo pueden subvencionar.

El valenciano tiene literatura escrita, antes de que existiera Cataluña.
El Mallorquín tiene diccionario antes de que Pompeu Fabra se inventara su catalán batua.

Esto me lo ha contado Don Federico.
Pero si a Ud. le molesta, lo quitamos.

Un beso. Corazón.

odradek dijo...

hablábamos de chomsky, creo, e insisto que no ha leído usted de eso ni las tapas.

todas esas chorradas de la lingüística histórica están superadas hace 100 años, cuando saussure y todo eso en europa y luego bloomfield y todo eso en norteamérica.
personalmente, las batallitas políticas de los neonazis como usted y los catalanes me la traen al fresco. que para sus legitimaciones paguen a unos cuantos para hacer esos estudios chorras que apuntalen sus tesis, pues otro tanto. yo estoy en el siglo XXX y no en el XIX.

sepa que todas esas chorradas que le cuenta su bufón preferido son tan discutibles como las de pompeu o pidal, más que nada porque pertenecen a la misma órbita metodológica y al mismo propósito: construir mitos. la mayoría llean tiempo superadas en la esfera de la lingüística. hablo de ciencia, no de política. por si nota la diferencia, aunque creo que no.

pero bien, cuando no sepa de algo, hable de oídas, y cuando se lo hagan saber, insulte y desprecie.

pero si quiere hacer bromas estúpidas, las haga con esa perra suya que tanto caso le hace.

y como yo no hablo con animales, ya no trataré de recordarle que fuera de su mierdoso fanzine radiofónico hay vida. e incluso vida inteligente.

hasta nunca.

Anónimo dijo...

He venido a parar como por casualidad a este blog y en principio me pareció interesante el tema, hasta que he leido uno de los comentarios del "oyente de Federico" (el que se refiere a las primeras constataciones del catalán, que las sitúa en el siglo XIII). Comprendo perfectamente la posición de d. Catalino al abandonar el foro, que parece preñado erudición e ilimitados conocimientos sobre las "periferias" de España... siempre vistas desde la interpretación centralizada y centralista de la Historia (como queriendo controlar -ni siquiera entender- "qué les está pasando a todos esos que se empeñan en hablar estas lenguas que se las podrían guardar en sus casas")...
Lástima que además haya errores tan garrafales como la omisión de "Les Homilies d'Organyà" ("Las Homilías de Organyà", Organyà es un pueblo, no un señor), que datan del siglo XI.
He estado a punto de pasar del blog por cómo se miran el ombligo todos los contertulios y hacen bailar algunos datos a su compás. Pero si no puntualizaba lo de "Les Homilies...", rebentaba.
Y creo que lo más sensato por mi parte será seguir el ejemplo de d. Catalino -de quien me gustaría saber algo más-: abandonar el foro, que no creo que me sirva ni como masturbación intelectual (vulgo "paja mental". Y perdón por la ordinariez.)